Un día como hoy, hace diez años, el cuerpo de la trabajadora sexual y dirigente de la Asociación de Mujeres Meretrices (AMMAR) de Rosario, Sandra Cabrera, apareció tendido en Iriondo al 600, con un disparo en la nuca. Cerca de allí, con un acto en la Terminal de Omnibus Mariano Moreno, esta tarde, sus compañeras recordarán y rendirán homenaje a la sindicalista que luchó por los derechos de sus compañeras. La fundadora de Ammar a nivel nacional, Elena Reynaga, aseguró que pasaron "diez años de impunidad, en los que la situación no cambió para nada; y en Rosario, incluso, empeoró. La ciudad está como incendiada, porque no mermaron ni la corrupción ni la impunidad, de hecho crecieron, porque hoy no solo van contra las compañeras sino también contra los jóvenes, donde está presente el tema de la droga y la inseguridad. Es caótico". Y aseguró: "Cuando matan a una trabajadora sexual por ser una militante, no es fácil organizarse y estar al frente de una organización así. Hay que tener los ovarios suficientes para dar la cara con tanto estigma que hay hacia nuestro sector. La ciudad de Rosario no fue fácil para Ammar después de la muerte de Sandra". También recordarán a la dirigente asesinada en ATE.

Para Reynaga es "lamentable que la Legislatura esté más preocupada en cerrar prostíbulos que en ir a fondo con cuestiones que urgen mucho más a la sociedad. Usan algunas cosas de pantalla para no discutir lo que realmente hay que discutir. Nosotras tampoco estamos de acuerdo con los prostíbulos, pero no se están haciendo las cosas con seriedad", planteó.

Según consideró, en Rosario, las trabajadoras se sienten "acorraladas" frente a "un intento de ir contra la trata de personas, sin separarla del proxenetismo y el trabajo sexual autónomo; sin mezclar". Es que tiempo atrás, las trabajadoras "intentaron" ejercer por sus propios medios mediante cooperativas, pero Reynaga lamentó que tras varios allanamientos y acusaciones de proxenetismo a las propias mujeres trabajadoras, muchas optaron por volver a un prostíbulo donde "trabajan seguras". El problema es que solo una de las mujeres firma el contrato de alquiler para la cooperativa, y la queja tiene que ver con que "la policía acusa a esa compañera de regentear el lugar, y le hacen causas por proxenetismo. Hemos denunciado estas cosas, porque entraron a las cooperativas y acosaron a las compañeras, las violentan y se llevan sus ganancias. Descreen de que hay compañeras que son cooperativistas, y en lugar de llamar a Ammar para ver un plan de acción, dejan a las compañeras sin fuente laboral, y el 96 por ciento son madres y son jefas de hogar", se quejó. "El problema del prohibir es que las compañeras terminan emigrando a otras provincias, y volviendo a los prostíbulos donde les venden protección, porque sabemos que estos tipos acuerdan para ello".

A mediados del año pasado, Ammar presentó un proyecto de ley para regular el trabajo sexual autónomo. Ahora, la iniciativa se encuentra en la Comisión de Trabajo del Senado Nacional. "Estamos preparando varias acciones para este año", adelantó Reynaga.

Dos días antes de que la mataran, Sandra había denunciado a un oficial de la policía por coimear a sus compañeras para dejarlas trabajar en la calle. Hoy, al recordarla, Reynaga aseguró que falta que "los gobiernos no se olviden que el crimen de nuestra compañera está totalmente impune y es una vergüenza para una ciudad que ha luchado tanto por los derechos humanos. Es increíble que no haya habido ningún tipo de ayuda para Macarena -hija de Sandra- que hoy tiene 18 años y una beba. Duele profundamente que el poder político se haya olvidado".

Al hablar de las actividades del año, Elena señaló que el 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, también recordarán a Sandra. Para las trabajadoras sexuales nucleadas en Ammar, el crimen de su compañera "es la combinación que el poder y su brazo armado no perdonaron, pero lo más lamentable -aseguraron en un comunicado- es que hasta la actualidad, tanto las autoridades provinciales como las nacionales siguen mirando para otro lado, cuando se llenan la boca de luchar contra el narcotráfico y la trata con fines de explotación sexual", reclamaron.

Según recordaron, Sandra "peleaba día a día poniéndole el cuerpo a las mafias de la policía santafesina y la federal, que se distribuían los negocios al mejor estilo de los años de la dictadura. Desde Ammar no claudicaremos hasta que su asesinato sea esclarecido, sabemos que es una lucha difícil y más cuando hoy desde el gobierno nos ponen en un lugar de clandestinidad e invisibilizacion. Cuando les decimos que nosotras sabemos que las medidas que toman `en contra de la Trata` son inútiles, aunque quizás cargadas de buenas intenciones, es porque nosotras estamos en la calle, le ponemos el cuerpo y hablamos desde la vivencia, no desde un escritorio teorizando sobre la realidad de las demás".

Para homenajear a la luchadora, a diez años de su muerte impune, trabajadoras de todo el país viajarán a Rosario -como todos los 27 de enero-, donde realizarán un acto a partir de las 19. Allí proyectarán el corto "Si te callas te matan" y hablaran dirigentes de Ammar. "Quizás alguna vez las trabajadoras sexuales podamos gozar de los derechos humanos como el resto de la población, y ese día con una mezcla de tristeza y alegría diremos que la muerte de Sandra no fue en vano", enfatizaron las mujeres. En tanto, desde ATE, la recordarán con un encuentro en la sede, donde Sandra tenía su oficina de Ammar. Allí estará también su hija Macarena.