Entre las 14 y las 22 de hoy, Rosario se sumará a las más importantes ciudades del país cuyas estaciones de servicio suspenderán el expendio de todo tipo de combustible. La medida que aquí fue ratificada por Federación de Expendedores de Naftas del Interior (Faeni), involucrará a decenas de estaciones en la ciudad, incluidas las que expender GNC. Rosario adhiere de esta forma al paro nacional que fuera anunciado y convocado por la Confederación de Entidades de Combustibles Hidrocarburos de la Argentina (Cecha) y la Federación de Comercio e Industria de la Ciudad de Buenos Aires; en reclamo de una urgente intervención del Gobierno a fin de revertir la actual situación de crisis y evitar "el probable cierre de otras 1500 estaciones de servicios", en todo el país.

La Federación de Expendedores con sede en Rosario y que conducen Walter Costa y Rubén Favini, renovó la convocatoria al paro nacional para hoy señalando que "buscamos el apoyo de todos los expendedores de combustibles líquidos, la solidaridad de los colegas del GNC y fundamentalmente una respuesta del Gobierno Nacional a nuestros justos reclamos". Y aseguraron que "estamos en el camino correcto, de la unión y la solidaridad, no dejemos de reclamar lo que es justo para nuestras empresas, empleados y familias", aseguraron en un comunicado.

Los últimos informes confeccionados sobre la realidad económica del sector aseguran que la pérdida de rentabilidad no ha parado de caer en los últimos años, "provocando el cierre de numerosas estaciones en todo el país. Sin apoyo fiscal de parte del gobierno, nuevamente, la realidad de muchos estacioneros será insostenible", aseguran desde las distintas cámaras del sector.

Vale recordar que la primera acción fue el pasado 31 de mayo cuando los empresarios realizaron un cese de actividades por tres horas. Ahora, ante la falta de respuestas por parte del gobierno, la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines de la República Argentina (Cecha) decidió que la medida de fuerza se extenderá por ocho horas.

El plan de lucha se implementó porque los estacioneros sostienen que "la rentabilidad del sector es nula". Entre otras variables, los empresarios consideran que el aumento de los salarios y del precio de compra de los combustibles, los cupos al suministro y la carga tributaria que representa el 60 por ciento del precio final, llevan a una crisis de rentabilidad a nivel nacional.

Por otra parte, la Federación de Expendedores de Naftas del Interior (Faeni) reveló que en los últimos tres años se cerraron dos mil empresas del sector y consideraron que el paro está vinculado al riesgo" que corren unas 4.700 empresas pequeñas y medianas, en su mayoría familiares, que expenden combustible, y que mantienen 50 mil fuentes de trabajo.