La tarde tranquila en barrio La Granada se vio alterada ayer nuevamente por el sonido de la retroexcavadora que pugnaba por encontrar nuevos túneles en un predio de la familia Cantero. Sin embargo la tierra removida solo dejó al descubierto basura y más tierra. La paz se vio también alterada por un entredicho entre vecinos y un equipo periodístico de Canal 9 que cometió la osadía de tratar de grabar imágenes en la cancha de fútbol que tiene en uno de sus costados un mural con el rostro de Ariel "Pájaro" Cantero. Jhoana, hermana del asesinado narco, la emprendió ferozmente contra los periodistas porteños, apoyada por un grupo de jóvenes de la zona. La revuelta se aplacó cuando varios policías llegaron en auxilio. Es que a solo doscientos metros del lugar un grupo de bomberos y policías de la Brigada Judiciales al mando de Cristian Romero seguían de cerca las excavaciones, en Melián al 6300, epicentro informativo tan solo 24 horas antes, tras el hallazgo de dos túneles.

Ayer, la fortuna fue esquiva en la tierra de un descampado lindero a la propiedad de Roberto Verdún, ex cuñado del Pájaro Cantero, que fuera allanada el martes. Cabe destacar que el "propietario" dejó el inmueble que se observaba prácticamente sellado.

Quedó claro que los túneles se bifurcaban para conectar varias propiedades linderas: había lozas para permitir el ingreso y aparecer en otros inmuebles. Las numerosas tapas de cemento que fueron encontradas en varios tramos de los túneles descubiertos, probaban que era posible ingresar por una casa y salir por otra. Sin embargo otras construcciones cercanas también propiedad de miembros de la familia Cantero, no fueron halladas. El trámite que tendrá por objeto constatar la existencia de más túneles, se concretará en los próximos días.

Uno de los abogados de la familia Cantero, salió a sentar posición de sus clientes. "Lorena (ex esposa del Pájaro) manifestó que esa propiedad fue habitada hace seis meses, con lo cual desconocía por completo la existencia de esos túneles. Esas construcciones no fueron diseñadas ni realizadas por miembros de la familia", expresó Carlos Varela.

El abogado respondió a los dichos del fiscal Guillermo Camporini, quien sostuvo que los túneles demostraban el poder que ostentan Los Monos. "Primero, esos túneles no fueron diseñados ni construidos por la familia. Segundo, la adquisición de esas propiedades fue posterior. Y tercero, superada cualquiera de las dos hipótesis anteriores, aún cuando hubieran sabido de la existencia de esos túneles, creemos que no se puede hacer un juicio de valor como hace Camporini. Lo que hay que acreditar es si la existencia de túneles configura un ilícito", dijo el letrado.

"Dentro de los roles que ocupamos en el proceso, Camporini es el acusador. Uno entiende cuál debe ser la posición de un fiscal. Son meras discrepancias valorativas respecto de un objeto. El fiscal tendrá una visión parcializada, como también la tenemos nosotros", agregó Varela.

"Apenas se difundió la noticia del hallazgo de los túneles advertimos que iba a tener una repercusión mediática. Son escenarios diferentes. Uno es el mundo periodístico, donde las conjeturas pueden hacerse libremente. Y otro es el mundo jurídico, que es el reino de las pruebas. Por cuestiones extrajurídicas se ha creado una leyenda urbana sobre la familia Cantero que tiene implicancias negativas enormes dentro de la investigación que realiza el juzgado de Instrucción 4ª", añadió el abogado.