La comisión de Derechos Humanos del Concejo decidió ayer "dar apoyo político a Valeria Stortoz y Fabiana Ferreyra", madres de Facundo Aguirre y Emiliano Cáceres, quienes denunciaron irregularidades en la investigación por la muerte de sus hijos, "asesinados por un compañero, alcoholizado, que estaba al frente al volante y chocó contra un camión estacionado, aproximadamente 150 kilómetros por hora, el 22 de febrero de este año", recordó la presidenta de la comisión, la radical María Eugenia Schmuck, quien recibió a las madres junto a los concejales María Fernanda Gigliani y Lorena Giménez, del Partido del Progreso Social, así como con Carlos Cardozo de Unión Pro Federal.

"Hay muchas dudas en lo concerniente a la actuación policial en esta causa", subrayó la edila radical y apuntó que "el que conducía el vehículo era el hijo de una funcionaria policial y por los datos obtenidos, hay evidente informalidad en el proceso de la investigación, por lo que nos parece que se debe investigar esa circunstancia junto a la causa de la muerte de los chicos".

En cuanto al procedimiento policial, la edila consideró que "no hay protocolo de actuación" y destacó que "a la Fiscalía no le dieron el parte del hecho hasta mucho después de la llegada de la policía, lo que es algo que no puede suceder".

El fiscal regional Jorge Baclini, manifestó -según dijo Schmuck- que "es el fiscal quien debe ordenar que se hagan los análisis al chico que estaba imputado en esta causa y no la policía, que hizo esa tarea siete

horas después y en base a un mililitro de sangre. Estamos muy preocupados por estos dos asesinatos y no queremos que queden impunes" .