Aquellas personas que hayan sido víctimas o querellantes de un delito, previo al 10 de febrero -cuando entró en vigencia el nuevo sistema penal-, deberán manifestar en Tribunales su voluntad de continuar con la causa. Así se planteó desde el Comité de Seguimiento del Sistema de Conclusión de Causas (o viejo sistema penal), conformado por representantes de los tres poderes del Estado. Se trata de un procedimiento establecido por ley para regular la finalización de los expedientes previos a la puesta en marcha del nuevo sistema. El trámite se podrá realizar todas los días, de 7.15 a 12.45, hasta el 10 de agosto próximo. La víctima o querellante deberá completar un formulario que está disponible en el juzgado penal donde se tramita su causa. "La intención es dar respuesta a la ciudadanía y poner los recursos donde son necesarios", dijo María Cecilia Vranicich, secretaria de Programas de Transformación de los Sistemas Judiciales. En causas graves, el trámite no será vital, ya que son impulsadas por los fiscales.

La medida lanzada esta semana tiene que ver con la búsqueda por "garantizar una gestión eficiente" del sistema conclusional, tal como lo expresa la ley 13.004, cuya función es "promover y concretar los procedimientos necesarios, sobre la base de los instrumentos procesales establecidos: mediación penal, probation (suspensión de juicio a prueba), juicio abreviado".

Por eso, quienes hayan iniciado actuaciones antes de la puesta en marcha del nuevo sistema deberán dar cuenta de su pretensión de continuarlas. "Desde el 10 de agosto, las causas que se van a archivar son las que no han tenido movimiento en los últimos seis meses", aclaró la funcionaria. Y agregó: "Se le está preguntando por primera vez a la víctima porque antes la causa no se trabajaba y nadie la consultaba. Generalmente, son causas leves o que ya no le interesan a la víctima por algún motivo. Es importante tener un panorama certero de cuáles son los expedientes a los que hay que ponerle más energía en el sistema de conclusión, de modo tal que los recursos se apliquen a eso".

Al mismo tiempo, Vranicich recordó que, meses atrás, el procurador de la Corte, Jorge Barraguirre, dio instrucciones a los fiscales sobre cuáles son las causas graves que deben impulsarse con prioridad, tales como homicidios, cuestiones con armas y enriquecimientos ilícitos. Las investigaciones por esos delitos, junto con otros que desde 2009 se resuelven en juicio oral, son impulsadas por fiscales. "Es importante optimizar los recursos y empezar a traspolarlos al nuevo sistema. El procedimiento en los dos sistemas está pensado para seguir dando respuestas", dijo. Y ejemplificó: "Hay muchas denuncias que se inician solo para cobrar un seguro, por un mero trámite; o por la pérdida de un celular".

Como respuesta a algunas de las preguntas frecuentes, el ministerio de Justicia indicó que el trámite "no requiere de un abogado", sino que la persona en cuestión debe asistir con su Documento Nacional de Identidad.

Si la víctima no manifestó su voluntad de continuar con la causa y quiere hacerlo luego del 10 de agosto, "se podrá pedir el desarchivo de una causa durante los tres años sucesivos, salvo que prescriba previamente. Este procedimiento requerirá el patrocinio de un abogado", indicaron.

El marco de la implementación del nuevo sistema de Justicia Penal, la Legislatura sancionó en 2009 la ley 13.004, donde se estableció el Sistema de Conclusión de Causas como un procedimiento especial para regular la adecuada finalización de todas las actuaciones iniciadas con anterioridad a la entrada en vigencia del nuevo sistema de Justicia Penal.

El comité para el sistema conclusional está integrado por el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Juan Lewis; un ministro de la Corte Suprema de Justicia, el Procurador General de la Corte Suprema; y un representante de cada Cámara de la Comisión Bicameral de Seguimiento Permanente de la Reforma Procesal Penal.

Para consultas, los interesados podrán comunicarse, durante las 24 horas del día, al 0800-777-2017, desde cualquier punto de la provincia.