El secretario de Seguridad de la Nación, Sergio Berni, se llevó ayer los agentes federales que quedaban desde aquel desembarco de hace nueve meses, y como mensaje de salida culpó a Hermes Binner por el avance del narcotráfico y su derivación en la multiplicación de la delincuencia común en Santa Fe. "El principal problema de Rosario hoy es el delito común. Cuando Binner era gobernador le advertimos de la connivencia policial con el narcotráfico, pero él no quiso atender el problema y apostó a la autogestión de la policía. Así llegamos a esto", dijo. En el Frente Progresista algunos reprobaron la crítica. Desde hoy, quedan unos 600 efectivos, entre agentes de Gendarmería, Prefectura y policías Federal y de Seguridad Aeroportuaria. Los 2000 federales que se marcharon deberán ser reemplazados por la Policía de Acción Táctica, creada por el gobierno de Antonio Bonfatti. Como saldo, Berni aseguró que "dejamos 350 causas judiciales abiertas sobre narcotráfico".

Avanzó por la calle interna del Destacamento de Gendarmería, en San Martín y Virasoro, ante una fila inmóvil de gendarmes formados bajo plátanos gigantescos e invitados entre los que se contaban referentes del empresariado local que pedían en vano que los federales se quedaran. En contraste con tantos uniformes y trajes, el funcionario felicitó a la tropa en jeans y zapatillas de trekking por "la misión cumplida" y les ordenó la arenga clásica: "Subordinación y valor".

El protocolo incluyó la asunción del comandante general Roberto Benítez como jefe del Destacamento. Y mientras los gendarmes volvían a prepararse para regresar a sus escuadrones de origen - Buenos Aires, La Pampa, Santiago del Estero, Santa Fe- Berni aludió cuatro veces a la gestión de Binner en seguridad pública.

"Rosario y la ciudad de Santa Fe casi quintuplican los índices de homicidios de la media nacional: más del 20 por mil cuando en Argentina es 4,6 por mil. Por eso ayudamos al gobernador Bonfatti: entendimos que no era un problema de narcotráfico sino de delincuencia, de violencia. El gran problema de la ciudad es el delito común. El gobernador tomó los apuntes necesarios, nos pidió una prórroga para formar una nueva policía y será beneficioso", dijo. Si el problema es ese y no el narcotráfico, Berni aclaró: "Hace unos años, cuando hicimos las primeras detenciones de miembros de la policía de Santa Fe involucrados directamente en bunkers de droga, le dijimos al gobernador Binner y él no quiso atender el problema: prefirió seguir apostando a la autogestión de la policía y terminó en todo esto: Santa Fe hoy tiene los índices delictivos más altos del país".

Berni recordó que al arribar el año pasado con las fuerzas federales, Rosario había superado los 260 asesinatos en un año. "Este año terminó con 40 homicidios menos. Logramos torcer la curva", celebró. Y añadió que entonces "era una sociedad que no tenía autoridad en la calle, se nota cuando en una moto van 3 o 4 personas, con chicos, sin casco, autos en contramano, e instalamos nuestra autoridad", afirmó.

"No olviden que nosotros detuvimos a (el ex jefe de Policía, Hugo) Tognoli. Y cuando le advertimos a Binner del serio problema de corrupción y connivencia policial con el narcotráfico, no quiso escucharlo y prefirió seguir con la autogestión de la policía, era más fácil eso que involucrarse en el problema. Hoy él está lanzando su campaña a presidente en Mar del Plata y nosotros, trabajando acá", chicaneó. También a ese motivo se debió la ausencia del ministro de Seguridad, Raúl Lamberto, en la despedida de los gendarmes.

El funcionario nacional aseveró que "la venta de drogas disminuyó bastante, pero el combate contra el consumo es de salud pública. Mientras haya consumidores, siempre habrá droga. El bunker era el símbolo de la corrupción policial. Vimos gente que llegaba a comprar a caballo. Los dos primeros detenidos que tuvimos fueron dos policías provinciales adentro de un bunker. Binner eligió no involucrarse, y estos son los resultados", recalcó.

En el balance, dijo que la misión demandó un gasto de 250 millones de pesos "sólo en viáticos", y redundó en la detención de 2.500 personas, el secuestro de 600 armas y "12 mil vehículos fuera de la ley", "y quedan más de 350 causas abiertas por narcotráfico, el capital más importante de este operativo".

"Nos vamos, pero queda un destacamento reforzado en inteligencia criminal más grande del país, con especialistas en lucha contra el narcotráfico. Siempre estaremos a disposición de Santa Fe cuando lo soliciten. El gobernador tomó nota del problema, íbamos a quedarnos 45 días, pero nos pidió tiempo para formar 2000 policías que son los que nos reemplazarán", dijo Berni.

El gobierno local acusó el golpe lanzado por el secretario de Seguridad. El ministro de Gobierno, Rubén Galassi, quien un rato antes había acompañado a Berni en el acto, reprobó: "Hacer especulaciones políticas para marcar un camino u otro, lejos de ayudar a resolver el problema hacen que los únicos que festejen con estas declaraciones son los delincuentes". En declaraciones a LT8, sostuvo que "la seguridad es responsabilidad de los distintos niveles de gobierno, así que hacer un planteo partidario o con un claro matiz diferenciador en función de que uno pertenezca a una fuerza política o a otra es incorrecto. Más allá de los niveles, más allá de la división de poderes, los delincuentes no están divididos por áreas, por eso el Estado para llevarle paz a la ciudadanía debe usar todos los recursos, sean nacionales, provinciales y eventualmente municipales", replicó.

El ministro de Gobierno afirmó que "hoy a lo que se le puso fin es a una forma de trabajo que estaba reforzada por más efectivos de la Gendarmería Nacional, lo que no quiere decir que sea el retiro de las fuerzas federales de Santa Fe, porque de hecho quedan alrededor de mil hombres que van a seguir cumpliendo tareas sobre todo en las rutas nacionales. Santa Fe ha incorporado 1.500 policías en los últimos seis meses y se están formando nuevos para que, entre marzo y abril, se incorporen en distintos puntos de la provincia otros 1.500 efectivos", añadió.

El director de la Policía de Investigaciones, Víctor Moloeznik, ironizó: "Es raro lo de Berni: habla de estadísticas que nadie conoce ni publica". Y la diputada del Frente Progresista Alicia Gutiérrez deslizó: "Ya era extraño que no se fuera sin hacer uso político de la colaboración obligatoria del gobierno federal hacia un estado provincial".