Tres hombres fueron imputados ayer por los robos al country Funes Hills, de la vecina localidad, perpetrados el viernes por la madrugada. El fiscal Nicolás Foppiani los acusó de "robo triplemente calificado por uso de arma de fuego, por ser cometido en poblado y en banda, y por uso de ganzúa". Uno de los detenidos protagonizó la fuga de ocho reclusos de la comisaría 24ª, de Granadero Baigorria, el 16 de junio pasado, y está acusado por el robo a una joyería. En la audiencia, los imputados negaron haber participado del hecho que despertó a vecinos del barrio privado, a las 3 de la mañana. También dijeron que no se conocen entre sí, y que la policía les pidió 50 mil pesos para no achacarles ese hecho y otros cometidos en los últimos días. Para la fiscalía, se trata de una estrategia defensista. La audiencia de prisión preventiva se realizará pasado mañana; y, mientras tanto, siguen presos. Se cree que hay más implicados y se investiga si los mismos hombres tuvieron algo que ver con el robo a los suegros de Lionel Messi, en febrero pasado.

"Haber actuado en comunidad, con un mismo plan delictivo junto a por lo menos dos personas más, cuya identidad no fue establecida, en el hecho de robo perpetrado en el barrio San Marino del complejo Funes Hills", les imputó Foppiani al inicio de la audiencia presidida por el juez Héctor Núñez Cartelle.

Según el relato fiscal, los acusados "ingresaron al predio tras violentar una parte del cerco perimetral"; una vez dentro, "irrumpieron por la puerta de acceso con una ganzúa", en la primera vivienda. Mientras, otra parte de la banda hizo lo mismo en otra casa. Las familias se encontraban durmiendo y fueron "amenazadas de muerte, con armas, maniatados y advertidos de que se llevarían a los niños si no entregaban dinero". Según se indicó, los ladrones se alzaron con 4 mil pesos, joyas, relojes y teléfonos celulares, en una de las viviendas; y 2 mil dólares, 10 mil pesos, relojes y celulares, de otra.

Justamente, uno de esos celulares fue encontrado en un departamento de Moreno 37, que luego fue reconocido por la víctima y se encontraron fotos propias en los archivos guardados. También se les secuestraron dos ganzúas, 700 dólares y más de 2 mil pesos.

El allanamiento fue realizado en el marco de otra causa que tenía como acusado a Jeremías Paulazzo, uno de los detenidos, por la evasión en la seccional de Baigorria. Allí, el acusado estaba preso por el robo a la joyería "Taller JM", de Maipú 1062, el pasado 25 de marzo. La fiscal Juliana González le imputó esos hechos y pidió acumular las causas.

Paulazzo, junto a Ricardo R., de 41 años y Germán B., de 39, ambos oriundos de Córdoba, fueron detenidos el mismo viernes al mediodía, cuando llegaron al lugar a bordo de un Chevrolet Vectra color negro. Sin embargo, los investigadores sospechan que hay al menos dos personas más implicadas, ya que los vecinos recuerdan haber visto a entre 5 y 7 ladrones.

Con este hecho, el pánico volvió al barrio cerrado, luego de que en febrero pasado, un grupo de siete encapuchados accediera a otras tres casas, entre las que se encontraba la de los suegros de Messi. El hecho se registró cerca de las cuatro de la madrugada del 20 de febrero pasado.

Las sospechas de que los acusados hayan estado involucrados tiene que ver con la descripción de la vestimenta de los imputados. Ayer, la fiscalía solicitó la entrega de la campera que llevaba puesta Paulazzo. La prenda es reversible: de un lado, negra y con capucha, como la describen las víctimas; y del otro camuflada, en tonos de verde militar, como describen otras víctimas. Ahora, será puesta a reconocimiento y peritada.

En tanto, durante la audiencia de ayer, los tres imputados intentaron defenderse de las acusaciones. Paulazzo dijo que le subalquilaba el departamento de calle Moreno a los otros dos acusados, a quienes no conocía, ya que los contactó a través de una mujer que trabaja en el boliche Jalizco, que suele frecuentar. Además, Paulazzo dijo que la policía le "agarró bronca", por haberse fugado, y que le hicieron "una mala jugada" achacándole el robo al country. Aseguró que les pidieron 50 mil pesos para no acusarlos, por lo que mencionó a un policía apodado "Tucumano".