Una vez más, la Justicia pone en peligro la vivienda única de Gilda, jubilada y discapacitada, con un nuevo llamado a remate. Luego de que el mes pasado se suspendiera la subasta por falta de oferentes, ayer el juez en lo Civil y Comercial Marcelo Bergia puso nueva fecha para el 21 de diciembre, a días de que la Cámara de Diputados provincial convirtiera en ley el proyecto de suspensión de los remates de viviendas únicas, familiares y permanentes, por 180 días. "Es un absurdo. Este juez no llama al diálogo, a la mediación, y vehementemente hace un análisis caprichoso del derecho, por lo que vuelve a poner el martillo sobre la mesa", protestó Nire Roldán, titular de Concejalía Popular, organización que acompaña a la intimada, de 70 años de edad. La semana que viene, varios diputados presentarán un pedido de informes en el juzgado para que se dé cuenta de la actuación en otros casos similares en los que "no se atendió la ley Lamberto (anterior)"; mientras que la abogada de la mujer presentará una nueva propuesta de mediación con la otra parte, nada menos que la hermana de la propietaria; ya que la casa, en la que Gilda vive hace 30 años, está en división de condominio.

Tras la suspensión de aquel primer llamado, el 26 de noviembre pasado se aprobó la ley de suspensión de los remates de viviendas únicas, familiares y permanentes, por 180 días. La iniciativa había sido alcanzada a la Legislatura por la organización Concejalía Popular. Sin embargo, según pudo saber este diario, el juez Bergia interpreta que en el caso de Gilda Sust no hay un conflicto de "deuda", sino de "división de condominio", como explicación a la no aplicación de la normativa.

Frente a ello, el ex concejal Roldán, lamentó que se haya hecho un nuevo llamado a subasta de la vivienda de Sarmiento al 1000. "En el último tiempo, no se intentó una mediación como plantea la ley, no se analizó la cuestión económica de la señora, ni se le mandó a hacer una visita ambiental. Por eso llama la atención la velocidad con la que se insiste en el remate", dijo Roldán, quien exigió una solución antes del 21 de este mes, para cuando planean movilizarse contra la subasta de la casa de la jubilada, que no tiene dónde ir y ya manifiesta "problemas de salud por esta angustia".

El 17 de noviembre pasado se vivieron momentos de tensión en el primer piso de Tribunales, frente al juzgado Civil y Comercial Nº 9, a cargo de Bergia. Gilda Sust terminó la jornada con lágrimas en los ojos y mucho más aliviada, ya que el magistrado resolvió la suspensión del remate por veinte días. La mujer relató por aquellos días que estaba abatida porque no podía llegar a un acuerdo con su hermana, que vive en Buenos Aires y se dedica al negocio inmobiliario, para evitar el remate del departamento por un juicio de división de condominio.

Cuando preparó el proyecto de ley, Concejalía Popular presentó el caso de Gilda como una referencia a la situación de más de 5 mil casos en la provincia. De hecho, la ley salió diez días después de aquel remate suspendido, y se estimó que el juez acataría esa cuestión, pero se sorprendieron con una nueva fecha de subasta del departamento. "¿Cómo puede ser que antes de poner fecha no vuelva a juntar a las partes? Los que aparecen como beneficiarios en estos casos son los usureros", se quejó Roldán, quien adelantó que si no se inicia un intento de solución alternativa, habrá una movilización a Tribunales para "evitar el atropello".