El ministro de Gobierno provincial Roberto Rosúa adelantó ayer que impulsará la puesta en marcha de "un botón de pánico" a bordo cada unidad de taxímetro para luchar contra los asaltos que sufren los choferes. El titular de la cartera política anunció que el nuevo sistema de monitoreo satelital para controlar la seguridad de los choferes estará en funcionamiento dentro de "15 ó 20 días" y que será "caro pero el mejor". Rosúa realizó estas declaraciones ayer después de la inauguración de la alcaidía mayor de la Unidad Regional II de la policía de Rosario, en la que hay capacidad para albergar a 456 internos y que demandó al gobierno provincial una inversión de doce millones de pesos.

Rosúa aseguró que "en 15 ó 20 días estará listo un nuevo sistema de seguridad" para los taxis que constará de un monitoreo satelital de cada unidad conectado con la Jefatura de Policía. Según precisó "se está negociando con los titulares de taxis y el sindicato de peones un sistema de vigilancia y fiscalización" y explicó que las estaciones de taxis estarán a cargo del monitoreo permanente pero que cuando un chofer presione "el botón de pánico" de un móvil, automáticamente aparecerá su ubicación en un monitor de la central de policía. Agregó que la fuerza de seguridad estará alertada "en tiempo real" de lo que sucede en cualquier taxi conectado al sistema satelital. "Es caro, pero es el mejor sistema que podría instrumentarse", completó el ministro de Gobierno sobre este plan.

Por su parte, el presidente de la Asociación de Titulares de Taxis Independientes (Atti), Mario Cesca, declaró a Rosario3.com que "esta es una opción más que se lanza, lo importante sería poder ejecutarla". Y sobre la negociación que mencionó Rosúa, señaló que la clave es contar con un financiamiento para que los taxistas puedan pagar los equipos. "Estamos de acuerdo con el monitoreo, pero tenemos que ver los costos. En Mendoza, este mismo sistema cuesta unos 900 pesos el equipo, más unos 40 obtener la frecuencia; y esto lo va a tener que pagar cada taxista", apunta Cesca. "Habría que buscar la forma de que el esfuerzo no sea sólo nuestro, que nos den alguna exención de impuestos, como por ejemplo de patente" concluyó el dirigente de los taxistas.

En otro orden, Rosúa realizó un pormenorizado informe sobre las construcciones carcelarias inauguradas, en ejecución y próximas a licitación, que en total alcanzan a una inversión de 182 millones de pesos. Y puntualizó que "las comisarías de Rosario fueron las grandes víctimas de esta abandono" en las construcciones carcelarias, pero aseguró: "Aquella preocupación seria está teniendo respuesta por parte del gobierno provincial".

En la misma línea, el gobernador Obedi dijo que "todo esto forma parte de un programa de construcciones carcelarias como no se había dado en más de 60 años en esta provincia". Según Obeid, la obra permitirá un "tratamiento más humanitario a los internos, eliminará el peligro potencial que significa tener detenidos alojados en comisarías dentro de la ciudad y además dispondrá de una cantidad de personal policial para dedicarlo a las tareas de vigilancia en las calles de Rosario".

La nueva alcaidía está emplazada dentro del predio que la actual jefatura de Policía, en avenida Francia al 5000 en la zona sudoeste, y permitirá el alojamiento de 456 internos, que se distribuirán en dos módulos para 100 detenidos cada uno y ocho pabellones con capacidad para 32 internos. Del acto inaugural participaron también el subsecretario de Seguridad, Gustavo Peters; el subsecretario de Asuntos Penales, José Benaglia; el jefe de la Policía provincial, Jorge Pallavidini, y el titular de Rosario, Héctor Hermida.