"La deuda principal y el desafío más grande es tener trabajo para todos", señaló ayer el arzobispo de Rosario, Eduardo Martín, luego de la reunión que mantuvo con los referentes del Movimiento Sindical Rosarino (MSR), que nuclea a más de 40 gremios de la ciudad. El arzobispo precisó que, según el índice elaborado por la Universidad Católica Argentina (UCA), en los últimos meses la pobreza subió cinco puntos. "Esto significa gente que sufre", apuntó. En este marco, Martín invitó a autoridades, empresarios y gremios a dialogar, ya que consideró que "son instancias que no se pueden dejar de lado". Desde el MSR señalaron que compartieron con el arzobispo la preocupación por la situación social que atraviesan la ciudad y la región. "Coincidimos en el diagnóstico", señaló Matías Layús, titular de La Bancaria. "Nosotros hicimos hincapié que dentro de las consecuencias que tiene este modelo implementado a nivel nacional está el tema concreto de los despidos", agregó.

La reunión entre el arzobispo Martín y los referentes del MSR surgió a partir de la participación del movimiento sindical en el Consejo Económico y Social, donde Layús tomó contacto con el representante de la Pastoral Social y desde allí se fue gestando el encuentro que finalmente se concretó ayer por la mañana en la sede de La Bancaria.

Al finalizar el cónclave, el arzobispo de Rosario precisó que a partir del índice elaborado por la UCA, un relevamiento que "para la iglesia es fiable y ha tenido un prestigio en la sociedad", subrayó Martín, "el año pasado daba 29 puntos de pobreza, mientras que la proyección para este año aumentaba entre cuatro o cinco puntos más". Más allá de los números, para el arzobispo "esto significa familiaS, significa personas, significa niños, significa gente que sufre".

Martín agregó que para la iglesia "el tema del desempleo, el trabajo, desde que dios hizo al hombre le dio el mandato del trabajo. Entonces, la falta de trabajo es uno de los factores de injusticia más grandes y más graves, porque sin el trabajo la persona no alcanza su dignidad de persona. Esto genera una baja en su autoestima, genera desunión en la familia, una cantidad de males enormes".

Para tratar de revertir esta situación, el arzobispo señaló: "Desde la doctrina de la iglesia y la enseñanza manifestamos nuestra cercanía hacia todos aquellos que más sufren y que están padeciendo estas dificultades. También su doctrina sobre el trabajo, sobre el derecho a asociarse de los gremios, el del reclamo justo".

Layús, que como anfitrión del encuentro ofició de vocero, dijo que con el arzobispo hablaron de la preocupación que tiene el MSR respecto a la situación social que atraviesa la región, particularmente la ciudad de Rosario, que fue compartida por Martín. "La iglesia promueve los ámbitos de diálogo social, nosotros estuvimos de acuerdo en esa sintonía, y lo que estamos haciendo es una forma de prevenir cuestiones como las del 2001, donde tuvimos una mesa de diálogo social pero con Monseñor Mirás caminando entre las villas en medio de los muertos que tuvo la ciudad en su momento", indicó el dirigente gremial a Rosario/12.

Los referentes del sindicato de Empleados de Comercio y de la Unión Obrera Metalúrgica, que integran el MSR, manifestaron sus preocupaciones en el encuentro que mantuvieron con el arzobispo. Los mercantiles, ante la amenaza de despidos del supermercado Coto, que consideran una extorsión por la implementación del descanso dominical, mientras que los metalúrgicos se refirieron a las suspensiones de los trabajadores del sector.