Recién llegado de Europa, el gobernador Jorge Obeid reunió ayer a parte de su gabinete en la Casa Gris, para analizar la trágica tormenta de granizo en Rosario que dejó cinco muertos, decenas de heridos y cientos de rosarinos sin techo. Obeid prometió ayuda económica a los damnificados -que se canalizará a través del Banco Municipal de Rosario, aunque para eso será necesaria una ley en la Legislatura- y anunció fondos especiales para reconstruir 725 viviendas del Fonavi (461 en el barrio Santa Lucía de Rosario y 264 en Granadero Baigorria), reparar escuelas -sólo quedan por refaccionar unas 20-, para restablecer el normal dictado de las clases, comisarías y centros de salud y tres subsidios de 100.000 pesos para los municipios de Pérez, Granadero Baigorria y Casilda. Por la tarde el mandatario provincial se reunió con el intendente Miguel Lifschitz, con quien repasó las acciones comunes entre los tres niveles del Estado: municipal, provincial y nacional. El jefe municipal precisó que "el objetivo es concluir los trabajos entre sábado y domingo, para que en la semana próxima sólo queden por resolver algunos casos puntuales".

En Fisherton. Obeid y Lifschitz mantuvieron el encuentro ayer a la tarde en la casa que el gobernador tiene en Fisherton, acompañados de colaboradores, con quienes se pasó revista a la situación de los barrios que más sufrieron con la caída del granizo. La vicegobernadora María Eugenia Bielsa, los ministros de Gobierno, Roberto Rosúa y Coordinador, Rubén Michlig; el secretario de Estado de Promoción Comunitaria, Juan Carlos Forconi; el diputado nacional, Ariel Dalla Fontana y el legislador provincial Marcelo Gastaldi, compartieron la reunión con los secretarios municipales de Gobierno, Juan Carlos Zabalza; de Promoción Social, Pedro Pavicich, y el subsecretario de Gobierno, Fernando Asegurado.

El gobernador aseguró ayer que "en forma inmediata se van a reparar todas las viviendas y las escuelas afectadas" por el fenómeno metereológico que se abatió sobre Rosario y la región. De igual modo adelantó que el Gobierno entregará la semana que viene a las municipalidades de Baigorria, Pérez y Casilda una partida de 100.000 pesos para cada una de ellas, de manera que puedan afrontar e iniciar la reparación de los daños que produjo en sus distritos el temporal de viento, granizo y agua.

Obeid también señaló que el gobierno estudia la manera de destinar fondos provinciales para apoyar económicamente a los pobladores que fueron afectados, para lo cual se está pensando en hacerlo a través del Banco Municipal de Rosario. "La Nación nos ha dado una mano grande en lo que hace a elementos materiales para incrementar la ayuda que se necesitaba dar en tiempo y forma", reconoció el mandatario santafesino, al tiempo que destacó "la coordinación y cooperación con que nuestros equipos (de la Provincia y la Municipalidad) se encuentran trabajando, lo que además de ser una buena señal de convivencia agiliza mucho esas tareas".

Por su parte Lifschitz remarcó que "la idea es seguir manteniendo un trabajo coordinado en lo que hace a las estrategias que diseñamos para atender la emergencia en el terreno para articular las respuestas".

Obeid y Lifschitz destacaron que la entrega de chapas, plástico y otros insumos se está desarrollando con total normalidad y de acuerdo al relevamiento que los equipos de la Provincia y la Municipalidad están llevando a cabo en barrios como Santa Lucía, Ibai Hondo y Villa Banana, entre otros.

En este sentido el mandatario provincial afirmó que "a partir de hoy se iniciaban las tareas para reparar todas las viviendas comprometidas en su estructura, particularmente las 464 del barrio Santa Lucía de Rosario y las 212 de Granadero Baigorria". Y adelantó que "durante todo este fin de semana se van a profundizar los trabajos de reparación en los establecimientos educativos afectados".

Por otra parte, el mandatario provincial subrayó que "de las 39 escuelas que no estaban en condiciones de acoger hoy a los alumnos sólo quedan por refaccionar unas 20", y adelantó que "la semana próxima ya estarán en condiciones de recibir al alumnado y así restablecer el normal dictado de las clases".

A las seis y media. Obeid llegó a esa hora a su despacho, según se encargó de subrayar el propio mandatario. Y se reunió con doce funcionarios de lo que la Casa Gris definió como un "Comité de Emergencia", entre ellos el subsecretario de Emergencia, teniente coronel José Bernhardt. "Son los que estuvieron más cerca del tema", explicó el gobernador. Lo curioso es de los doce integrantes del Comité de Emergencia, once, viven en la ciudad de Santa Fe. El único rosarino era Rosúa.

"¿Qué medidas adoptó para asistir a los damnificados por el temporal en Rosario?", le planteó un cronista. Obeid lo cortó en seco. "Primero, si me lo permiten, voy a hacer un breve análisis de lo que pasó en Italia", dijo el gobernador. Y se dedicó a repasar su viaje a Bolonia, al frente de un grupo de empresarios santafesinos que salió a buscar negocios.

Después del aviso, Obeid explicó que se había reunido a la mañana temprano con funcionarios de su gabinete, con quienes analizó "las consecuencia del meteoro que sufrió Rosario". "Una vez que me impusieron de todos los detalles, he dado instrucciones al director de Vivienda de la provincia, Carlos Feruglio (uno de los doce que participó en la reunión de gabinete) para que inmediatamente se comience con la reparación de las viviendas afectadas: 461 en Rosario y 264 en Granadero Baigorria".

Obeid comentó que también había llamado por teléfono a Lifschitz, con quien después se reuniría en Rosario, "para ultimar los detalles de un trabajo coordinado entre la Municipalidad de Rosario y el gobierno de Santa Fe, de manera de actuar en conjunto en la resolución de los problemas que causó el meteoro. Esto fue algo imprevisto, como ocurre con las catástrofes climáticas, pero donde hay un deber del Estado en salir dar respuestas, sobre todo a los sectores más necesitados", señaló.

Obeid le propuso también a Lifschitz canalizar la ayuda económica de la provincia a los damnificados a través del Banco Municipal de Rosario, aunque para la transferencia de partidas será necesaria una ley de la Legislatura. "La provincia habilitaría una suma de dinero en función de las necesidades para que el Banco Municipal pueda otorgar líneas de créditos a tasa cero o a tasa subsidiada o sin retorno en el caso de pequeñas empresas que pueda significar un alivio al sector productivo afectado.

-¿A cuánto llegaría ese aporte de la provincia?

-No quiero hablar de cifras hasta que no tengamos una verdadera evaluación de la magnitud de los destrozos -concluyó Obeid.