El gobierno provincial y la municipalidad anunciaron ayer que la totalidad de los "reclamos masivos" generados en los sectores más carenciados de Rosario tras el temporal del miércoles pasado "fueron asistidos en su integridad". En total, 12 mil familias recibieron 50 mil chapas y otros aportes del Estado para poder recomponer sus viviendas de los efectos causados por la granizada. De inmediato, la vicegobernadora María Eugenia Bielsa y el intendente Miguel Lifschitz aclararon que "las demandas puntuales y las situaciones de pobreza estructural" que aún no fueron cubiertas serán atendidas desde el próximo lunes de manera institucionalizada en dependencias municipales y provinciales habilitadas para ese fin. Con este anuncio Bielsa y Lifschitz buscaron llevar tranquilidad a los manifestantes que ayer protagonizaron 13 piquetes en la ciudad. "Acá hay un Estado que da respuesta a los reclamos sociales, no hay razones para extener los cortes", repitieron los funcionarios.

Bielsa y Lifschitz se reunieron ayer junto a integrantes de las áreas sociales y de seguridad del municipio y la provincia en el Palacio de los Leones. Estuvieron presentes el ministro de Gobierno, Roberto Rosúa, de Salud, Silvia Simoncini, el secretario de Promoción Comunitaria provincial, Juan Carlos Forconi, su par municipal, Pedro Pavicich y el presidente del Concejo, Miguel Zamarini.

Al iniciar la rueda de prensa, Lifschitz destacó la efectividad y celeridad de la acción conjunta entre municipio y provincia para dar respuesta a las demandas surgidas tras el temporal.

Bielsa precisó que fueron en total 32 los puntos de la ciudad intervenidos y 12 mil las familias asistidas. "Entre miércoles y jueves se hizo el relevamiento y de inmediato arrancó la distribución de la ayuda que se intensificó estos últimos tres días", dijo la vicegobernadora y aseguró que "la demanda masiva fue asistida en su totalidad. Probablemente queden familias que no fueron asistidas, que en realidad no fueron detectadas todavía".

En ese sentido, Bielsa anunció que desde el "próximo lunes se institucionalizará la atención personalizada, se escucharán reclamos puntuales en algunos centros municipales Crecer y en los centros de Desarrollo Zonal de la provincia, no en los centros de salud".

Por su parte, Rosúa informó sobre la fluctuación de los piquetes y la política de seguridad de la Casa Gris. "El miércoles hubo 17 cortes, hoy (por ayer) 13, dos de ellos más conflictivos en el acceso al puerto y en Avellaneda y Circunvalación. En total hubo 46 patrulleros de la ciudad que recorrieron los lugares conflictivos, más otros 15 que llegaron de localidades aledañas, con 475 agentes policiales afectados" (ver aparte).

Según Bielsa "salvo en la ocupación hecha en los terrenos ubicados frente al Distrito Oeste donde el Polo Obrero se atribuyó la coordinación del mismo, sería irresponsable hablar de intereses políticos (detrás de los piquetes). Están vinculados con reclamos de pobreza estructural".

La vicegobernadora aclaró que las soluciones de fondo al déficit habitacional llevan tiempo. Recordó las dificultades con las que se topó la administración provincial al momento de encontrar terrenos urbanizables para construir 4500 viviendas financiadas por la Nación. En efecto, hasta la fecha municipio y provincia sólo acordaron la construcción de 1500 unidades a la altura de la autopista a Santa Fe.

Consultada sobre si la situación estaba ya totalmente controlada, Bielsa se mostró cauta: "Sería irresponsable hablar ya del día después, estamos siguiendo el conflicto y las consecuencias del temporal día a día, haciendo balances y analizando el estado de situación".

La vicegobernadora destacó "el cumplimiento de la palabra empeñada" de parte del Estado en sus tres niveles y ponderó además "que durante todos estos días no hubo un sólo reclamo alimentario ni de ropa".

Lifchitz confirmó haberle pedido al gobernador Obeid un aporte extra de alrededor de un millón de pesos para reparar los daños en el mobiliario urbano. Rosúa aseguró que la provincia entregará fondos, en un monto a definir, a Rosario, Perez, Funes, Casilda y Granadero Baigorria.

Lifschitz aclaró que las tareas de limpieza de la ciudad se vieron demoradas por los piquetes. "De todas formas estimamos que entrado el fin de semana habremos culminado de limpiar lo que dejó el temporal, que multiplicó por cinco el volumen de residuos habitual", detalló.