"No se puede legislar, ni proyectar una ciudad sino se hace en forma global e integral. Debemos pensar en la ciudad que queremos pero no por partes, sino en un todo. De otra manera tendremos una gran ciudad llena de parches", planteó ayer el concejal Jorge Boasso. El edil radical dijo no poder "estar de acuerdo con un plan con zonas vacías, sin indicadores urbanísticos, sin plan de infraestructura de servicios y transporte, dejándolo al libre arbitrio de funcionarios de turno. La normativa debe acompañar la vocación de las distintas áreas de la ciudad. Sobre todo, no debemos olvidar el espíritu de barrio del anillo perimetral y una vocación de mayor altura y comercial del centro de la ciudad".

Para Boasso, en el área central deben mantenerse las alturas vigentes, "pero con una mayor exigencia de cocheras. Un departamento, una cochera. Oficinas y hoteles, el 50 por ciento de las unidades".

El edil opositor cuestionó la conformación del Area de Reserva para calle San Juan que comprende 8 manzanas desde Entre Ríos a Maipú y de San Luis a Mendoza. La propuesta de Boasso es que se le asigne por esta norma los indicadores urbanísticos correspondientes.