Armando Perichón, el actual interventor de la UGL-Delegación IX del PAMI cumplió un mes en su gestión, un tiempo que todavía le resulta escaso para hacer un diagnóstico, tal como él dijo a Rosario/12. Este médico que estuvo durante muchos años en el HECA y en el Hospital Centenario, al frente del Cudaio (Centro Unico de Ablación e Implante) y después fue al INCUCAI a nivel nacional, llegó con el bagaje 'de los lugares que son verdaderas trincheras' como él mismo dijo en referencia a los efectores públicos y con la capacidad de gestionar. Tal vez por eso, señala que en este mes en el que está a cargo de la delegación ﷓su responsabilidad y autoridad no involucra al los efectores propios, el PAMI I y el Pami II, ni tampoco a los consultorios y otras dependencias que funcionan en las instalaciones de Sarmiento al 400.

Perichón mismo da detalles de esta estructura y dice que su gran preocupación es por articular con los directores de los policlínicos, Dante Giannone en el I y la ex ministra de Salud de la provincia, Claudia Perouch en el II y que este mecanismo ya va mostrando algunos resultados.

Según Perichón cuando entró al edificio de Sarmiento al 900 para hacerse cargo de la intervención, le impactó la lentitud que había en la realización de los trámites y que atribuye, sencillamente, a "costumbres institucionales". Y después suma otro elemento: "Hoy corre todo el mundo, estamos en una reorganización en la que los mismos empleados, ya sean del área administrativa o profesionales, vienen con propuestas para mejorar la atención y eso me parece muy importante. A mí no me conocían, yo no estuve nunca relacionado con el PAMI, ni como prestador ni como nada".

En una especie de 'pequeño' balance que puede hacer en un mes de gestión menciona que "ahora obtenemos un detalle de todo lo que queda registrado en el PAMI Escucha".

-¿Y en verdad el PAMI escucha?, le preguntó este diario.

-El detalle que recibo indica que todas son quejas, así que es bueno recibirlas, tener también las opiniones de centros de Jubilados y de la Coordinadora de Jubilados y Pensionados a cuyos miembros les propuse reunirnos los últimos viernes de cada mes para que me traigan los reclamos que tengan y ver en qué se pudo avanzar respecto de los problemas que ya plantearon. Con respecto al PAMI Escucha hay que poder evaluarlo correctamente, porque lo que se deja allí a veces no es del orden de la urgencia médica, pero sí lo es en el orden de lo social y hay que atenderlo. Desde que estuvo Graciela Ocaña, el modelo prestacional del PAMI cambió y no sólo se atiende lo relativo a la obra social. También están los programas que justamente tienen que ver con el área social como es el Pro-Bienestar (subsidios varios, entre otras cosas para alquileres) y donde se incluyen las inquietudes como la que planteó Enrique Gigena, de la Coordinadora, respecto de los centros de día. El mismo mencionó los clubes de barrio como instituciones con las cuales se podría llegar a realizar convenios y emprender actividades terapéuticas para los hombres y mujeres que asistan.

Un aspecto que Perichón destaca es la unificación de la relación con los médicos de cabecera para elevar también la calidad prestacional, ya que son pocos los que están especializados en gerontología y tienen, en general, el perfil de médicos clínicos o de familia. A través de un convenio con la Facultad de Ciencias Médicas ya se puso en marcha la organización de la capacitación para tratar con la población beneficiaria del Instituto Nacional de Jubilados y Pensionados.