"Viví un calvario; no sabía en qué momento me mataba", dijo S., la víctima de violencia que soportó desde 2009 los sometimientos de su ex pareja. La mujer relató que cuando lo detuvieron en agosto de 2013, su hija le dijo: "Ay mamá, ya somos libres". El acusado enfrenta además otro proceso judicial por los abusos sexuales a los que sometía a la mujer. Esa causa está en trámite en el Juzgado de Instrucción Nº 13, según indicó la víctima. "Hasta me revisaba para ver si yo había tenido relaciones con otro hombre, porque el insistía con que yo tenía a otra persona", dijo. Y agregó: "Sabía andar armado y yo vivía asustada, encerrada con rejas hasta adentro de mi casa. Mi mente no descansa de tanto daño". S. destacó el trabajo de los abogados y profesionales del Centro de Atención Judicial (CAJ), y también a la ONG Aprender a Vivir Mejor, que coordina Claudia Barbieri en La Toma, de la que ella participa activamente. "Ahora quiero ayudar yo; porque muchas mujeres no saben que sufren violencia", dijo.