Domingo, 27 de mayo de 2007 | Hoy
SANTA FE
La ministra Simoncini deberá comparecer por el caso de la chica a la que le negaron un aborto terapéutico y murió al no poder tratarse del cáncer que padecía.
Desde Santa Fe
La muerte de Ana María Acevedo ya se convirtió en un dolor de cabeza para el gobierno de Jorge Obeid. La ministra de Salud, Silvia Simoncini, deberá comparecer el miércoles próximo al mediodía en la Cámara de Diputados para dar explicaciones por los incumplimientos del Estado con esta joven madre de 20 años, oriunda de Vera, que falleció hace una semana en el hospital Iturraspe, donde le negaron un aborto terapéutico para tratarse un cáncer y la obligaron a dar a luz un bebé prematuro de cinco meses que tampoco sobrevivió. El caso ya puso en jaque al director del nosocomio, Andrés Ellena, a quien la delegada en Santa Fe del Instituto Nacional contra la Discriminación y la Xenofobia, Stella Vallejos le pidió la renuncia en público. Pero ahora, el debate parlamentario pondrá sobre el tapete una cuestión de fondo: ¿Por qué no se hacen abortos terapéuticos en la provincia?
"Acá hubo un abandono del Estado. No se asume que la provincia no tiene un sistema de salud y que tanto el gobernador, la ministra, y obviamente, el director del hospital y algunos médicos ponen por encima de la salud pública y del interés común sus ideas religiosas y culturales. Y esto es gravísimo", denunció la diputada del ARI, Alicia Gutiérrez, autora del pedido de interpelación a Simoncini.
Hace dos semanas, la diputada socialista Lucrecia Aranda ya había solicitado la comparecencia de Simoncini en la Cámara, pero la mayoría automática del PJ -que derogó de facto la norma constitucional que obliga a los ministros del Poder Ejecutivo a comparecer ante la Legislatura- lo convirtió en un pedido de informes por escrito. "Pero ante el fallecimiento de Ana María, la semana pasada, insistimos con la convocatoria a la ministra para dar explicaciones", dijo Gutiérrez, quien en este segundo intento fue acompañada por Aranda y el bloque del ARI. El viernes, el presidente de la Cámara, Edmundo Barrera, la llamó y le dijo que Simoncini estaba dispuesta a ir a Diputados el miércoles, al mediodía.
-¿A la comisión de Salud o a la Presidencia? -le preguntó una colega de LT10.
-A la Presidencia. Desde que entramos a la Legislatura, peleamos para que se cumpla con lo que establece la Constitución: que se pueda interpelar a los ministros en el recinto, pero el bloque del PJ se niega sistemáticamente. Entonces, apelan a esto, a que por buena voluntad los ministros van a la Presidencia de la Cámara, cuando, en realidad, tienen la obligación de hacerlo. Y los legisladores, tanto de la oposición como del oficialismo, están obligados a controlar al Poder Ejecutivo -contestó Gutiérrez.
Según la diputada el caso de Ana María Acevedo revela que "la provincia no tiene un sistema de salud. Y más allá de un viejo conocido nuestro, el doctor Ellena, creo que las responsabilidades llegan hasta las más altas esferas del gobierno, no sólo a la ministra, también al gobernador Obeid, porque acá se privilegian las cuestiones religiosas y culturales por encima de la salud pública y esto es gravísimo. No es casualidad que Santa Fe es una de las dos provincias que se negó a firmar la reglamentación del aborto terapéutico que propuso el ministro de Salud de la Nación, Ginés González García. Y una de las que se negó a firmar fue la ministra de Salud, Silvia Simoncini", recordó la diputada del ARI.
-¿Y esto empieza con una política errática en salud reproductiva?.
-Empieza con otra cosa mucho más grave. Empieza con que hay 'miradas fragmentadas' e 'intervenciones parciales', como lo dice muy bien el dictamen del Comité de Bioética del hospital Iturraspe. Bueno, las 'miradas fragmentadas' y las 'intervenciones parciales' atentan contra una atención de calidad. Eso es lo que sucede en Santa Fe, donde no tenemos un sistema de salud que empiece con la atención primaria y contenga al paciente, pertenezca al sector social que pertenezca y mucho más si es de un sector desfavorecido como en el caso de Ana María Acevedo que era analfabeta -planteó Gutiérrez. "Tengo entendido que Ana María solicitó la primera atención en el hospital de Vera, en mayo de 2006, o sea hace un año, por un problema odontológico. ¿No le hicieron una radiografía? Porque si se la hubieren hecho, quizá podría haber saltado el problema (el cáncer), sobre todo, porque durante meses padeció fuertes dolores que obligaron a su internación. En ese momento no estaba embarazada. ¿Alguien le dijo que no podía quedar embarazada? ¿Que era absolutamente necesario que no quedara embarazada? Bueno, todos esos interrogantes se los plantearemos a la ministra el día miércoles".
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