Viernes, 8 de octubre de 2010 | Hoy
LUX VA A > SO YOU THINK YOU CAN FUCK?
Un reality para convertirse en la nueva estrella porno gay americana deja a Lux pegada a la pantalla y convertidx en jurado sólo para favorecer a un muchachito que se obstina en ofrecer sólo una de sus partes.
Si algo puedo decir de mí es que gay no soy. Y que me gusta mirar porno gay. Es una manía que tengo esa de quedarme prendada de ese brillo aceitoso que se ponen en los musculitos esos muchachitos sobredimensionados del porno gay puro y duro en el que no se verán más que chorizos y morcillas –así es la diversidad en ese mundo turgente, hay que poner al negro (un metro de encaje no se le niega a naides– entre globos de anabólicos y yes yes yes dichos al punto del vómito. Pues bien, así estaba yo el domingo, la nariz colorada del solcito que me tomé obligadx por una resaca que me arrojó sobre el banco de una plaza sin notar que había amanecido y llegado el mediodía y unx con estxs mechas. Así que corrí a mi refugio de luz eléctrica y sólo para quitarme los restos de noche opté por la higiénica costumbre de la descarga buscando con la mano libre el sitio que me haría feliz. ¡Sorpresa! Llegué a él, tan cerca llegué que me convertí en postulante aunque mi solicitud todavía está en trámite, ¿sólo porque el licuado de banana yo lo tomo de la fuente y no en pastillas hechas para inflar glúteos? No. Eso dice la Dominique Ford, que es la productora del reality So you think you can fuck? (¿qué?, ¿será una virtud poder garchar? Que lo pongan en mi epitafio: Lux y la virtud, un sólo corazón. “No sabríamos dónde ponerte”, se sinceró la productora. Claro, porque ellos son todos muy ordenaditos: doce participantes, seis “bottom” y seis “tops” (sí, bottom es culo, y lo de tops lo dicen por activo), una ruleta para definir el sitio en el que lo harán y un minuto y medio para inventarse la historia con título y todo. Después, a garchar. ¿Y cómo que dónde me van a poner? ¡En el medio! Ni arriba, ni abajo, ni al centro, aunque sí adentro. Me terminaron ofreciendo un sitio en el jurado y tuve que aceptar, sólo para poder sentarme un ratito sobre las partes de Matthew Rush, siempre urgido el muchacho, y siempre untadx Lux para alegrarlo, aunque, digamoslo, todo fue virtual y hecho con mis propias manos, incluso el voto que le di a Perry —de los bottom—, un muchachito tan oscuro como blando al que quiero como protagonista de una de las pelis de Dominic, que ése es el premio a conseguir entre otras baratijas como Iphones, dildos y lubricantes. ¿Que prenda la cámara? Sí, claro, en cuanto tenga la mano libre les muestro todo lo que le falta a vuestro reality.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.