"Que las necesidades pudieran situarse entre esas cifras me parece irresponsable", consideró el vocero de Asuntos Económicos de la Comisión Europea, Amadeu Altafaj, quien salió a responder a la titular del Fondo, Christine Lagarde, por haber lanzado esa cifra, y recalcó que, según las reglas del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria, la ayuda iría a través de préstamos al Estado, que es el que canaliza las ayudas, porque "no hay ayudas directas posibles a los bancos".

Además, consideró que lo primero que hay que hacer es una evaluación de las necesidades auténticas de España para "disipar las dudas sobre el sector bancario". Una vez que se haga esto, añadió, "ahí se verá cuáles son las fuentes de financiación pertinentes".

Altafaj resaltó que Madrid aún no planteó formalmente esa necesidad y subrayó que "no hay que anticipar pasos que aún no se han dado". En este sentido, insistió en que un hipotético rescate de la banca ibérica a través de los fondos de la zona euro debería ser "canalizada a través del Estado", lo que supone que no habría pagos directos a las entidades.

En este sentido insistió que las ayudas no se otorgan directamente a los bancos sino a través del Estado, por lo cual, añadió, el gobierno del Partido Popular deberá ser "muy pragmático" y a utilizar las reglas que existen actualmente.