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La Sala VI de la Cámara del Crimen eschuchó hoy a la defensa del informático Diego Lagomarsino, único imputado por la muerte del fiscal Alberto Nisman, y a las querellas de la familia del extitular de la UFI-AMIA para definir el pase de la causa al fuero federal, a pedido de la jueza Fabiana Palmaghini, quien se declaró "incompetente".

Los letrados que defienden a Lagomarsino, Gabriel Palmeiro y Martín Chasco, lamentaron que Palmaghini cambiara de criterio tras las declaraciones testimoniales de los exagentes de inteligencia Carlos Alberto Rodríguez y Antonio "Jaime" Stiuso, cuando “días antes había rechazado un pedido para declararse incompetente” y subrayaron que los dichos de esos testigos, quienes reforzaron la hipótesis del homicidio, fueron “meras opiniones”.

En ese sentido, la defensa del técnico informático pidió que se revoque el fallo en el que la juez Fabiana Palmaghini se declaró incompetente y que la pesquisa continúe en el fuero penal ordinario.

En tanto, las querellas insistieron con que la denuncia que presentó el fiscal 14 de enero de 2015 contra la expresidenta Cristina Kirchner “selló la suerte del fiscal”, quien apareció muerto horas de antes de tener que asistir al Congreso para defender la denuncia en una audiencia pública.

Las querellas, especialmente la que representa a las hijas menores de edad de Nisman, pretenden que el envío del expediente al fuero federal no sea solo por el presunto delito de “violación de correspondencia”, en el que Palmaghini fundó su declaración de incompetencia, sino que insistieron con la hipótesis del “magnicidio”.

Así lo afirmó la jueza federal de San Isidro Sandra Arroyo Salgado, a quien, como representante de las hijas que tuvo en su matrimonio con Nisman y por haber conferido poderes a los abogados Juan Vigliero, Manuel Romero Victorica y Federico Casal, el tribunal le permitió el uso de la palabra.

“Fue un homicidio ejecutado por su actuación funcional”, sostuvo la jueza, al tiempo que calificó el hecho como “el más grave desde la vuelta de la democracia”.

Pablo Lanusse, abogado de la madre de Nisman, Sara Garfunkel, destacó que cuando Palmaghini hizo referencia al lugar donde Nisman fue hallado sin vida, en el piso 13 de un departamento en la zona de Puerto Madero, de esta capital, aludió a “la escena del crimen” y no a “la escena del hecho”.

Ambas querellas coincidieron también que el asesinato del fiscal se concretó porque hubo una “zona liberada” y que fueron las autoridades que primero llegaron al lugar las que permitieron la “alteración de la escena”.

Tras escuchar durante algo más de tres horas a las partes y al fiscal de la Cámara Ricardo Sáenz, quien también se pronunció a favor de la competencia de justicia federal, los camaristas Mario Filozof –que presidió la audiencia realizada en Viamonte al 1.100 de esta capital- Julio Lucini y Rodolfo Pociello Argerich se retirarom “a deliberar”.

De todas maneras, el tribunal decidió “habilitar los días 19 y 20 de marzo”, para brindar celeridad al tratamiento de los agravios de la defensa y las réplicas de las querellas contra los fundamentos expuestos por los letrados de Lagomarsino.