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Mientras la inflación interanual hasta agosto pasado arrojaba un 43,5 por ciento de aumento según las estadísticas de la Ciudad de Buenos Aires, la recaudación tributaria de septiembre ascendió a 168.317 millones de pesos, solo un 30 por ciento más que en el mismo mes del año pasado.

El titular de la AFIP, Alberto Abad, destacó que "el IVA y el impuesto a los débitos y créditos anduvieron muy bien", pero afirmó: "No me gustaría sacar conclusiones por un mes", marcó el funcionario.

El IVA tuvo un alza de 38,4 por ciento y llegó a 53.856 millones de pesos; mientras que el impuesto al cheque creció en similar magnitud y reportó 12.063,2 millones de pesos. En tanto, el impuesto a las ganancias sumó 34.425,8 millones de pesos, que representa un avance de 13,6 por ciento, y por bienes personales se pagaron 517,4 millones de pesos, con una caída de 18,3 por ciento explicada por el beneficio otorgado a los contribuyentes "cumplidores".

Luego de varios meses de caídas de entre 30 y 50 puntos, las retenciones a las exportaciones tuvieron una suba de 9,7 por ciento a 5172,2 millones de pesos. En tanto, los derechos de importación se dispararon 68,1 por ciento a 5310,1 millones de pesos.

Los impuestos a los combustibles produjeron ingresos fiscales por 6353,3 millones de pesos, que representa un alza de 33 por ciento en la comparación interanual, y el sistema de seguridad social recaudó 45.232,9 millones de pesos, un 32,7 por ciento por encima de lo obtenido en setiembre de 2015. Por su parte, los impuestos internos coparticipados subieron 85 por ciento a 4698,6 millones, a raíz de los aumentos que se impusieron al tabaco.