Tras ser consultado sobre la decisión de las autoridades del Banco Central de revocar la autorización para que Gabriel Martino y Miguel Angel Estevez se desempeñen como titular y vice de la filial local del HSBC, el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, puntualizó que "no hay opción de que uno tenga un banco y lo maneje como quiera; lo maneja como dice la autoridad de aplicación o no lo puede manejar".

Entre los fundamentos que motivaron la decisión del BCRA se concluyó que, en su carácter de representante legal de la mencionada entidad financiera, Martino no dirigió las acciones necesarias para mitigar y abordar adecuadamente el riesgo de prevención del lavado de activos y financiamiento del terrorismo, situación que a través de diversas sanciones impuestas por la Unidad de Información Financiera y el Banco Central ha tenido impacto cierto sobre el riesgo operacional de la entidad.

El jefe de ministros subrayó que el Banco Central “tiene una tarea adicional respecto de lo que significa el control de cada una de las entidades financieras, sean públicas o privadas, en ejercicio específico de su propia legislación, porque desde 1935 hay legislación que es propia a las entidades financieras y deben ser respondida a rajatabla”.

“Por esa misma razón en algún momento fue desplazado el titular del Citi”, remarcó Fernández, y añadió que se “ha tomado la decisión porque ha entendido, con esa propia legislación donde prácticamente asimila a los responsables de los bancos como si fuese un empleado público, pero lo asimila porque tiene un nivel de ordenamiento interno y de cumplimiento que tiene que llevarse a la práctica”.

“En ese marco, si no se cumplió y facilitó nada menos que el lavado de dinero en la forma en la que se lo exhibe, tiene todo el derecho del mundo a pedir que sea reemplazado ambos directivos como lo pidió”, concluyó.