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Los dos millares de becarios internos del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) no cobran desde el año pasado. Resumido y recortado, el Presupuesto 2002 no alcanzó para pagarles en diciembre los 700 pesos que cobran, por promedio, cada mes. “Los becarios vivimos de esto. La investigación es nuestro trabajo. La situación es desesperante, muy angustiante”, dijo a Página/12 Alberto Vázquez, becario posdoctoral. Ayer, las autoridades del Conicet aseguraron que el pago se concretaría esta semana, posiblemente mañana o pasado.
El Conicet concentra cerca del 40 por ciento de los becarios del sistema nacional de ciencia y tecnología. Casi dos mil de ellos se distribuyen en institutos y universidades del país, mientras que más de 200 están en el exterior. Para explicar por qué los becarios internos no recibieron el pago del último mes del año pasado, el directorio del organismo argumentó que la devaluación y el precio del dólar produjeron “un agujero financiero”. También admitió que en 2002 el Conicet sólo recibió el 70 por ciento de su presupuesto, ya que el Ministerio de Economía no ejecutó la totalidad de lo previsto por ley. Ante ese panorama, las autoridades optaron por pagar las becas de los becarios externos (en dólares) y se quedaron sin recursos para los internos.
Después de diversos reclamos de la red de becarios y de los gremios, con el último remanente de recursos se acaba de hacer un pago de 140 pesos, a cuenta. Y, para afrontar la deuda restante, la conducción del Conicet decidió esperar la ejecución del Presupuesto 2003. Así, con suerte, el “agujero” se patearía para fines de este año.
“Más allá de la coyuntura, siempre se le paga con retraso al Conicet”, lamentó Vázquez, investigador del IAFE. Y agregó: “La mayoría de los becarios tenemos entre 25 y 30 años, y nos dedicamos full time a la investigación. Además de completar nuestra formación, es nuestro trabajo, vivimos de esto”. Según las categorías, los becarios cobran entre 600 y 800 pesos al mes. A través de una carta, los becarios externos del Conicet se solidarizaron con los becarios internos: “Ante el ahogo financiero que sufre el sector de ciencia y tecnología, el hilo se corta por lo más delgado. Los becarios, que no tenemos ni voz ni voto en el Conicet, que no cobramos un sueldo sino un estipendio (no tenemos vacaciones, aguinaldo, obra social), somos los primeros en sufrir este ahogo, con atrasos que se han vuelto sistemáticos –señala el texto–. Además de expresar nuestra indignación..., queremos alertar sobre la destrucción a la que se sigue sometiendo al sector científico. Lamentablemente, los gobiernos pasan y las políticas quedan”.
Ayer, ante la consulta de este diario, y a través del Ministerio de Educación, las autoridades del Conicet informaron que entre mañana y pasado se realizarían los pagos adeudados. Y que enero se pagaría en fecha, a comienzos del mes próximo. Desde la junta interna de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) en el Conicet, Juan Manuel Sueiro detalló: “El problema fue que la Jefatura de Gabinete no había firmado la decisión administrativa que permite hacer la transferencia del Presupuesto. En la mayoría de los organismos nacionales esto impactó en los contratos y pasantías, y en el Conicet afectó a los becarios. Aparentemente, el Gobierno estaba esperando el acuerdo con el FMI. Ahora asumieron el compromiso de que van a liquidar las becas en lo inmediato. Pero hasta que no tengamos garantías, nosotros seguimos en estado de alerta”.
De solucionarse este conflicto, ya hay otro en puerta. El Presupuesto de este año prevé la restitución a los trabajadores del Estado nacional del 13 por ciento que se les estaba recortando a sus salarios desde 2001. Si bien los becarios volverían a cobrar sus estipendios sin recorte, hay serio riesgo de que no se les devuelva el porcentaje que se les esquilmó en los últimos 18 meses. “A los docentes e investigadores nos van a devolver el retroactivo en bonos –alertó Cristina Ibarra, investigadora y miembro de la coordinadora del Conicet–. Pero a los becarios los quieren considerar contratados y dejarlos afuera. Encima de que no tienen ningún derecho laboral y de que les descontaron el 13 por ciento, ahora no se lo quieren devolver.”