“Quieren debilitar, fracturar o intervenir el centro de estudiantes para hacer pasar su política: arancelar; profundizar los cupos y restricciones; impedir el control estudiantil de bares, fotocopiadoras y otros servicios, para seguir adelante con sus negociados y sobreprecios.” Con esa dura declaración se despachó la comisión directiva del centro de estudiantes de la Facultad de Arquitectura (UBA), en rechazo a una resolución tomada por el consejo directivo de esa unidad académica. “El consejo aprobó homologar las elecciones de centro con las de claustro. Esto implica casi una intervención, porque la facultad designaría a las autoridades de mesa, se encargaría de guardar las urnas y de la seguridad de los comicios, y el decano fijaría los criterios para escrutar. Con los antecedentes que tiene el radicalismo en la universidad, eso no nos da ninguna garantía”, explicó Lucas Giono (CEPA), presidente del centro. “En la resolución –agregó Giono–, se incluyó una amenaza de desconocer al centro si las elecciones no se hacen en esas condiciones.” De cara a los comicios que debían realizarse la última semana del mes, el conflicto repite el enfrentamiento entre las autoridades de la FADU y el frente de izquierda que el año pasado derrotó a Franja Morada.