Alternativas
La economía como cuestión social
Rubén Lo Vuolo. Editorial Altamira

A contramano del discurso hegemónico, esta obra, definida como “en construcción” por su autor, se propone recuperar la tradición que considera a la economía preocupada principalmente “por los procesos de crisis y transformación de la sociedad”. Esto significa negarla sólo como una “mera instrucción acerca de técnicas de análisis al servicio de un único sistema normativo, de sesgado contenido ideológico”. Este objetivo supone, inmediatamente, recuperar el debate sobre la función de la política económica en la vida cotidiana y la generación de soluciones alternativas a las del pensamiento único. La obra trata aspectos como la casta del saber convencional, los dogmas de este saber, el caso de la convertibilidad en Argentina y la cuestión social en el debate internacional.

¿Cuál es

El pasado jueves el economista de Goldman Sachs, Alberto Ades, hablaba a Radio Mitre desde Nueva York en nombre de los “mercados”. La periodista Magdalena Ruiz Guiñazú le preguntaba, entre otros temas, por el efecto de la Ley de Crédito Público, redactada por Horacio Liendo, que propone garantizar con recaudación impositiva bonos de deuda. “Francamente la mayoría de los inversores con los que yo hablo aquí no entendían por qué el equipo económico insistía en este proyecto. El consenso de la gente de acá era que, ley o no, en una situación de crisis la Argentina iba a pagarles primero a los empleados públicos y los jubilados que a los tenedores de bonos y, por lo tanto, no le asignaban gran peso a esta ley”, explicó Ades. Quedó claro que el exceso de sobreactuación suele no ser bien recibido.

Efecto Bebé. Los argumentos etéreos abandonaron las explicaciones de los operadores bursátiles. No sucedió en Buenos Aires, pero sí en Tokio. La semana pasada las acciones de los fabricantes de mamaderas y demás artículos para bebés se dispararon. La causa: la princesa Masako espera su primer bebé. Los inversores creen que el embarazo real producirá un “efecto contagio” sobre una población con tasa de natalidad en descenso. Los papeles de Pigeon, principal fabricante japonés de mamaderas, crecieron un 19 por ciento. Wakado, que fabrica leche en polvo y alimentos para bebés, subió un 8,8 por ciento y Combi, fabricante de cochecitos, ganó un 4,5 por ciento.

Una granjera tenía nueve decenas de huevos para vender. Envió al mercado a sus tres hijas, entregando a Nadia, la mayor, una decena, a Tatiana tres decenas y a Katia, la más pequeña, cincuenta huevos. Antes de que partan le dijo a la mayor: “Confío en que podrán ponerse de acuerdo en un precio que les asegure, a cada una de las tres, obtener por los huevos la misma cantidad de dinero en total. También, que el producto de la venta y el precio sea el mismo para las tres y que finalmente obtengamos, en números redondos, 10 pesos como mínimo por cada decena y no menos de 90 pesos por las nueve decenas”. ¿Cómo lo lograron? RESPUESTA

Concursos y quebradas

Red de Salud SA. Prestaciones de salud, solicitó su concurso preventivo con un pasivo aproximado de 320.000 pesos.
Prodava SA. Industria cosmética, se proveyó su concurso preventivo denunciando una deuda de 508.050 pesos.
Nework SA. Ramo plástico, se decretó su quiebra por una deuda de 12.377 pesos a pedido de la Unión Obreros y Empleados Plásticos.

El Presidente hablaba con la prensa molesto por las versiones que señalaban un excesivo protagonismo de su ministro de Economía.
–En las charlas que tenemos todos los días soy siempre yo quien tiene la última palabra.
–¿Sí? ¿Y cuál es?
–Lo que usted diga, señor ministro.

Respuesta: Nadia aleccionó a sus hermanas para que vendieran los huevos por septenas, a 3 pesos cada una, y cada huevo restante a 9 pesos, con lo que cada una obtuvo exactamente 30 pesos en total. A los compradores no les quedó otro remedio que aceptar su insólito sistema de venta pues las hermanas detentaban el monopolio de la venta de huevos.