MEDIDAS

Los sectores exportadores reciben ahora un subsidio variable (atado a la cotización del euro), pero aquellos que recibían devoluciones de impuestos, ahora deberán resignarlas, de modo que el aparente beneficio del orden del 8 por ciento se reduce (en promedio) a la mitad. Alguien se preguntó qué sucederá cuando el euro cotice 1 a 1 con el dólar. Les cuento: el reintegro que percibían hasta ahora será historia, y el beneficio del subsidio cambiario desaparecerá. Entonces, pregunto: ¿qué festejan? No debemos olvidar que lo que cambia en el nuevo escenario son las decisiones sobre producción futura, de modo que el incentivo del subsidio está por verse cuando la nueva producción se realice en los mercados. Pero como el subsidio está atado a la suerte del euro (que entra en circulación en el 2002), me pregunto; ¿si el euro se pone 1 a 1, como ha dicho el ministro de Economía en febrero del 2002? ¡Adiós subsidio! Tercera pregunta, ¿ingenuidad o suspicacia? Finalmente, dejando de lado el sector externo, surge la cuarta pregunta. Si el efecto neto de las reformulaciones de los distintos impuestos es de 300 millones para el fisco, ¿de dónde salen los recursos que permitirán aumentar el consumo? Quinta pregunta: ¿no será que todo esto está pensado para decir lo que la gente quiere escuchar? Si efectivamente es así, mis más sinceras felicitaciones, porque es muy probable que las expectativas de la gente rompan el círculo vicioso en el que las mismas expectativas nos tienen. Esto en tanto y en cuanto la gente no se dé cuenta de que en economía los Reyes Magos tampoco existen.

Mario Tetaz
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