CULTURA › EL FILM DE MAUSI MARTINEZ
“Los personajes de Puig siguen vivos”
Por S. F.
Es un documental peronista sobre un escritor antiperonista, que protagonizó una revolución en la literatura argentina equivalente a lo que significó el peronismo en la vida política del país. Esta es la innovadora perspectiva adoptada en Puig... 95% de humedad, de la actriz y cineasta Mausi Martínez, que se estrena el jueves 21 en el Centro Cultural Borges. El aporte más notable de este film es el rescate de la dimensión política –tantas veces negada por lecturas demasiado epidérmicas– del autor de El beso de la mujer araña. “Yo tengo una identificación con la gente que ha sido reprimida, hay una identificación con las mujeres de los años ’40, con los géneros despreciados de los años ’40, porque la cultura con K oprimía esta cultura popular. Me interesaba ver por qué una letra de Le Pera suena linda y por qué no se la puede mencionar o colocar dentro de un contexto literario”, dijo Puig en una conferencia en España. Además de los testimonios del propio escritor, el documental se nutre de los recuerdos, anécdotas y análisis de Elvio Gandolfo, Alan Pauls, Guillermo Saccomanno, Carlos Puig, José Amícola, Ernesto Schoo, Felisa Pinto, Graciela Goldchluk, Marta Merkin, Carlos Ulanovsky, César Calcagno y muchos de los vecinos de General Villegas, donde nació Manuel Puig.
Mausi Martínez cuenta que durante mucho tiempo le costó asumir su identidad peronista, hasta que decidió blanquearla. “Mis abuelos habían sido peronistas, mis padres también y todos los novios de mi vida fueron peronistas.” Sin embargo, ella aclara que es consciente de que en la obra de Puig hay una fuerte crítica contra el peronismo. “Manuel no fue peronista, pero me pareció muy interesante rescatar una mirada, desde el peronismo, sobre un personaje que no era peronista”, dice Martínez en la entrevista con Página/12. Su relación con el universo de Puig empezó mucho antes del documental, en Formosa, cuando su abuela, que trabajaba como bibliotecaria, le leyó por primera vez Boquitas pintadas. En 1997, Oscar Araiz la convocó para interpretar el papel de la Rabadilla. “Cuando le conté a mi vieja que iba a hacer esa obra, me dijo: ‘¿No te acordás? Era la que te leía la abuela’. Ahí me cayó la ficha, y empecé a recordar a la Raba y esa historia que me había parecido alucinante”, señala la actriz y documentalista.
–¿Por qué rescata la dimensión política de Puig y prescinde de su condición de homosexual?
–El universo homosexual está puesto en su obra, me parece que no hacía falta poner el acento otra vez en lo mismo. En todas las obras de Manuel hay una lectura política que está siempre presente y eso era lo que a mí me interesaba rescatar. La traición de Rita Hayworth muestra un exilio distinto: el que se va de la tierra propia, para ir al centro, a Buenos Aires. En Pubis angelical, él planta a los personajes y los hace discutir sobre el peronismo. En El beso de la mujer araña, y lo cuenta muy bien Graciela Goldchluk, decidió eliminar críticas veladas hacia el régimen cubano para no quedar del lado de los gusanos.
–En el documental también desliza una especie de hipótesis sobre la relación de Puig con el peronismo: aunque él no era peronista, usted se anima a insinuar que los personajes de Puig sí podrían serlo.
–Eso es lo que quise mostrar cuando aparece hablando la gente que vive en Villegas hoy: los personajes de Puig están más vivos que nunca. Con Boquitas..., una de las discusiones más interesantes que se dio, en ese sentido, es si la Raba era o no peronista; lo mismo sucedía con Juan Carlos. Había chicos de 16 hasta gente de 50 años que discutían por primera vez en Villegas sobre lo que significaba ser peronista.
–¿Cómo surgió el título del documental? ¿A qué alude?
–Cuando hay 95 por ciento de humedad, seguro que va a llover, que se va a caer el cielo. Me parecía que la gente en Villegas estaba viviendo como si algo estuviese por estallar, y en toda la obra de Manuel también hay una violencia contenida que en algún momento va a hacer eclosión. Aunque no estaba segura de que ése sería finalmente el título, Graciela Goldchluk me reveló que una de las obras inconclusas de Puig es Humedad relativa 95%. Hay muchos analistas que creen que La traición... refleja la discusión que él tenía con la ley paterna. Mi análisis, que coincide con el de Goldchluk, da a entender que el tema en esa novela es su separación de la madre. Con Humedad relativa... empieza la relación con su padre, no resuelta, y me pareció que era bueno ponerle este nombre a algo que va a ser el eslabón perdido de una obra que nunca se llegó a resolver. Y el eslabón perdido de Puig era su ser político, que a muchos les cuesta ver y que a mí me interesaba rescatar.
–¿Por qué lo político en Puig es el eslabón perdido?
–Lo cuenta Calcagno en el documental, cuando Puig les decía: “¡Qué hacen aquí, perseguidos por Isabel Martínez de Perón, y ustedes dicen que Perón es lo más grande que hay en la Argentina!”. En Pubis angelical, Ana escucha la explicación que Pozzi le da sobre el peronismo, y esos argumentos los tomó de las charlas y discusiones que tenía con Calcagno en México. Puig dijo las cosas que tenía que decir en un momento en que acá nadie lo podía escuchar, por los dogmatismos y la soberbia de la izquierda.