Cuando todo indicaba que el romance entre Pablo Migliore y Racing continuaría viento en popa, un desacuerdo con respecto a la forma de pago de su contrato provocó la ausencia del arquero en el entrenamiento de ayer. La dirigencia, enojada, explicó que “Migliore quiere tener privilegios que ningún otro jugador en Racing tiene”. El problema es que el futbolista quiere un contrato dolarizado y el club sólo paga sus vínculos en pesos. Si no hay acuerdo, Migliore debería regresar a Boca, propietario de la mitad de su pase.

“El contrato de Migliore para la próxima temporada estaba acordado desde hace un año, cuando hicimos el préstamo. Y ahora, su apoderado presentó una nueva exigencia, que Racing no está en condiciones de cumplir”, manifestó ayer el vicepresidente de la entidad, Pablo Podestá. “Racing no se moverá de esta postura. Esta modalidad se aplica en todos los clubes y ya lo hicimos el año pasado. Racing no cambió las reglas de juego. Sólo estamos queriendo que se respete lo que se firmó”, agregó el dirigente.

Por el lado del jugador, Eduardo Rossetto, su representante, aceptó las diferencias con la dirigencia y esgrimió su punto de vista. “La discusión es por el tipo de cambio del dólar en el contrato. Nosotros pedimos incluir una cláusula en la que se mantenga el valor del tipo de cambio al día de pago”, esbozó el empresario. Precisamente, de aceptar esa cláusula, Racing estaría celebrando un contrato dolarizado. “El cambio del dólar es al día de hoy. El (por Migliore) quiere cobrar su contrato en dólares y eso no podrá ser”, enfatizó, por el lado del club, Podestá. Y remató: “El quiere tener privilegios que no tiene ningún otro jugador y se aprovecha de que hoy es el único arquero que tiene el equipo”.

Según la dirigencia, la actitud del arquero y su representante podría provocar que Racing desista de la contratación, lo cual obligaría a Migliore a regresar a Boca. Hasta ayer, cuando todo se presentaba encaminado, Racing había acordado con el arquero un aumento del monto sobre su nuevo contrato y abonar el millón de dólares de la opción de compra, de los cuales el 15 por ciento se abonaría en efectivo al propio jugador.

El faltazo de Migliore, por segunda vez en la semana, no cayó bien entre los dirigentes. “Si no quiere jugar en Racing, que se vaya”, llegó a decir un integrante de la comisión directiva. Y también molestó al entrenador, Ricardo Caruso Lombardi, que si bien lo considera una pieza importante en la estructura del equipo habría decidió dar marcha atrás en sus intenciones de mediar en el conflicto.

El presidente del club, Rodolfo Molina, no dudó en apoyar la negociación que está llevando adelante Podestá. “Estamos defendiendo los intereses de Racing y si Migliore no sigue, buscaremos un arquero de jerarquía para nuestro equipo”, sentenció.

En medio de este tironeo, el resto del plantel académico continuó ayer el trabajo de pretemporada. Por ahora, los únicos refuerzos confirmados oficialmente son Matías Cahais, Damián Steinert y Damián Ledesma. En tanto que Adrián Lucero estaría cerca de firmar la renovación de su préstamo.