DEPORTES › MAÑANA JUEGAN EN CORDOBA EL TERCER CLASICO DEL VERANO

Boca-River, un tema policial

El problema de la seguridad prevalece sobre lo futbolístico, después del escándalo en Mar del Plata. El jefe del operativo del sábado pasado es el mismo que propuso meter presos a los chicos de la calle.

Boca y River volverán a enfrentarse mañana en el estadio mundialista de Córdoba, en lo que será el tercer superclásico de este verano, pero sólo lo harán si los organizadores y la policía provincial otorgan garantías y refuerzos de seguridad. El escándalo sucedido el último sábado en el estadio José María Minella de Mar del Plata todavía está fresco: a pesar de los 850 efectivos policiales afectados al operativo, se produjo una batalla campal entre hinchas, que dejó como saldo destrozos, heridos y hasta un muerto; aunque el deceso se produjo en otras circunstancias, lejos de la cancha y cerca del casino, unas tres horas después de suspendido el partido.
El jefe de planeamiento de la policía de Córdoba, Roque Dambolena, manifestó ayer que en esa ciudad se hará todo lo posible para que en el superclásico no se repitan los hechos de violencia. “El público que viene a ver River-Boca en Córdoba nunca generó incidentes. En las ediciones anteriores nos hemos manejado bien. Igualmente, vamos a tomar los recaudos para que no pase lo de Mar del Plata”, dijo Dambolena.
Lo ocurrido en la ciudad balnearia preocupó a muchos dirigentes del fútbol, entre ellos Mauricio Macri y José María Aguilar, y a las autoridades en materia de seguridad. A los dirigentes, porque los hechos ocurren justo cuando se está negociando con el Gobierno una reducción de los costos de los operativos de seguridad (ver aparte), y a los funcionarios, por la sospecha de cierta desidia en el accionar policial.
El secretario de Seguridad, Juan José Alvarez, evitó juzgar la actuación de la policía o si la cantidad de efectivos era mayor o menor a lo pactado. Sin embargo advirtió que “lo de Mar del Plata se veía venir”. Lo dijo con relación a lo ocurrido en el verano de 2001, cuando el entonces jefe del operativo policial, comisario Deraldo Luziaga, ordenó a la guardia de infantería retirar una bandera colgada en el corazón de la barra brava de River, cuyo resultado fue una batalla cuerpo a cuerpo entre hinchas y policías, y significó el inmediato pedido de renuncia por parte de Ruckauf al jefe policial.
El jefe del operativo del sábado fue el comisario mayor Carmelo Impari, el mismo que tuvo sus tristes minutos de fama cuando en octubre de 2001, como director general de Coordinación Operativa del ex ministro Ramón Verón –el segundo lugar en importancia dentro de la bonaerense–, repartió entre las 18 jefaturas departamentales una circular que ordenaba realizar “amplios operativos” para detener a los menores y jóvenes “desprotegidos en la vía pública”. Las críticas de las distintas entidades de Minoridad obligaron al reemplazante de Verón –justamente, Juan José Alvarez– a remover al comisario y desplazarlo a la jefatura departamental marplatense.
Impari no acertó en sus consideraciones posteriores a los incidentes violentos, al afirmar que el operativo de seguridad no había fracasado.
“Lo que pasa es que este estadio –el mundialista de Mar del Plata– está preparado para que se juegue un Francia-Hungría y no un River-Boca”, disparó después. Lo cierto es que en Mar del Plata, a donde acudieron poco más de 30.000 espectadores, se pagó por un operativo que contemplaba 850 efectivos, a razón de uno cada 35 personas, pero la policía no se mostró tan rigurosa a la hora del ingreso de banderas y elementos contundentes. Hasta circuló la versión de un “pacto de no agresión” entre ambas hinchadas, que habría sido sellado ante la propia policía.
Mientras tanto, en Córdoba todos piensan que mañana el estadio Olímpico podría estar lleno. El sábado pasado, Belgrano y Talleres jugaron allí el primer encuentro de la Copa Ciudad de Córdoba y la policía tuvo un enfrentamiento con hinchas de Belgrano, aunque no pasó a mayores.

Compartir: 

Twitter

Los incidentes se produjeron justo cuando los dirigentes negocian una baja en los costos de seguridad.
En Córdoba, donde se jugará el partido mañana, se atajan: “Acá nunca generaron violencia”.
 
DEPORTES
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.