El seleccionado argentino de vóleibol perdió ayer de manera contundente 3-0 ante Rusia, en el cierre de la tercera ronda del Campeonato Mundial de Italia, y deberá competir ahora para definir los puestos noveno al decimosegundo. Argentina fue vencida con amplitud en el estadio Nelson Mandela de Florencia con parciales de 25-22, 25-17 y 25-15, luego de una hora y ocho minutos de juego. El plantel nacional se enfrentará mañana contra España, desde las 12, en Florencia, en el primer cruce por la reubicación. En el duelo ante los rusos, el equipo no exhibió la audacia y convicción necesaria para quebrar a un rival de mayor experiencia y rodaje internacional.

El entrenador argentino, Javier Weber, explicó luego del encuentro que jugaron “el peor partido del Mundial. A veces estas actuaciones pueden ocurrir, pero estoy triste”. Weber destacó que Argentina “tiene un equipo joven, que tiene que terminar el Mundial jugando bien como en el comienzo del torneo”.

Mientras, el capitán del seleccionado, el sanjuanino Rodrigo Quiroga, puntualizó que la recepción fue uno de los mayores déficit del equipo contra Rusia. “No jugamos bien y nuestra recepción no fue buena. Rusia dominó el partido. Ahora el desafío es concentrarse y rendir en los próximos partidos”, completó.

Como en el partido contra Serbia, Argentina tuvo problemas con la recepción y, en consecuencia, tuvo una elaboración de juego desprolija y movimientos de ataque tardíos y erráticos. En ese marco, Rusia, con la altura de su bloqueo y la potencia de su ofensiva por las puntas, impuso los tiempos del partido. Sin embargo, el seleccionado ruso entregó muchos puntos no forzados (ocho en el set inicial, seis con el servicio) que le permitieron a Argentina acercarse en el marcador, aunque de todas maneras resignó el parcial por 25-22.

En el inicio del segundo período, Argentina jugó con mucha intensidad, con la concentración que le había faltado en el arranque del partido. Pero el enorme porcentaje de error del equipo conspiró contra las posibilidades de asumir el protagonismo. Rusia, con más oficio, aprovechó esa situación y obtuvo el segundo set por 25-17.

En el tercer parcial, Argentina salió a la cancha con un nuevo armador, Nicolás Uriarte, pero la variante no fue suficiente para detener al seleccionado ruso. El equipo argentino perdió fuerzas para luchar cada pelota y Rusia se llevó ese set por 25-15.

Argentina formó con De Cecco (1), Conte (10), B. Costa (4), Pereyra (9), Quiroga, Solé (3) (FI); A. González (líbero). Luego ingresaron: Ocampo (6), Giustiniano (2), Scholtis (0), Uriarte (0) y Crer (2).