Si hace poco más de un mes parecía fuera de la Selección Argentina por los conflictos con el entrenador, hoy la realidad es completamente opuesta. A tres días del debut del conjunto nacional frente a Bolivia en la Copa América, Carlos Tevez integró el once inicial con el que Sergio Batista plantó al equipo en el entrenamiento de ayer en el predio de Ezeiza, de cara a la inauguración del certamen el próximo viernes.

De esta manera, el técnico le abriría las puertas al delantero del Manchester City en el elenco titular y dejaría en el banco de suplentes a Angel Di María, quien era hasta el momento una pieza inamovible en el planteo que propone Batista. La situación de Tevez cambió radicalmente en los últimos días: de estar al margen de toda convocatoria pasó a candidato a titular. En el medio hubo una charla privada con el DT en la que limaron las asperezas que habían surgido en su relación desde el año pasado.

Por otro lado, en el ensayo también fue titular Esteban Cambiasso, plenamente recuperado de la lesión muscular que le había impedido trabajar con normalidad desde el inicio de la concentración del plantel. En consecuencia, la formación para el primer partido sería: Sergio Romero; Javier Zanetti, Gabriel Milito, Nicolás Burdisso, Marcos Rojo; Ever Banega, Javier Mascherano, Cambiasso; Ezequiel Lavezzi, Messi y Tevez.

Con ese panorama, el tridente ofensivo que moldea el entrenador para el cruce con Bolivia estaría compuesto por el crack del Barcelona y el ex atacante de Boca, que ya supieron jugar juntos en algunos encuentros amistosos con Batista al frente de la Selección e incluso lo hicieron en el complemento del partido frente a Albania que terminó con goleada argentina 4-0, el 20 de junio pasado.

En ese sentido, y previendo el desafío que se avecina, el técnico del seleccionado boliviano, Gustavo Quinteros, aseguró ayer que apostará por una “marca escalonada” para intentar controlar a Messi como al propio Tevez, si es que se confirma su inclusión. Con la mente puesta en el choque ante los locales, el entrenador del equipo del altiplano sabe sobre las figuras que contiene Argentina.

Por eso, señaló: “Nosotros no sólo pensamos en cómo controlar a Messi, sino que pensamos en qué hacer con varios jugadores más que tiene el rival. La idea es hacer una marca escalonada. Esperamos poder hacerlo bien”. Y agregó: “Es claro el favoritismo de Argentina, que muestra a jugadores de una categoría superior a la nuestra, pero podemos lastimarlos si somos inteligentes a la hora de plantear el partido. La idea será no desesperarnos y generar un bloque defensivo compacto que les haga imposible la salida rápida”.

Por lo pronto, Argentina ajusta los últimos detalles para encarar su debut en la Copa América y volverá a entrenarse hoy en el predio de la AFA, y por la tarde Batista y dos jugadores atenderán a los periodistas.