La Cámara Nacional en lo Criminal confirmó el sobreseimiento del vicepresidente de River, Diego Turnes, y del dirigente Daniel Bravo, en la causa por supuestas amenazas al árbitro Sergio Pezzotta la tarde en que el equipo descendió a la Primera B Nacional. También fue ratificado el cierre del sumario penal en relación con el empleado de River Jorge Adrián Calderón, quien había sido denunciado por tener a su cargo el control de la puerta por la que los barrabravas locales habrían accedido al vestuario para presionar y amedrentar al juez. Los hechos investigados se habrían registrado en el entretiempo del partido jugado en el estadio Monumental de Núñez, entre River y Belgrano, el 26 de junio de 2011.