El equipo argentino de Copa Davis intensificó ayer los entrenamientos en Pesaro de cara a la serie con Italia por los cuartos de final. La práctica, en doble turno y con temperaturas superiores a los 30 grados, se desarrolló sobre el polvo de ladrillo del Círcolo Tennis de Pesaro, donde el viernes se pondrá en marcha el match y donde lo esperan los singlistas Fabio Fognini y Andreas Seppi.

Entre las notas salientes de ayer estuvo el fuerte trabajo realizado por Juan Martín Del Potro. La Torre de Tandil entrenó a buen ritmo pegando fuerte con el revés, en una nueva prueba de la muñeca izquierda, teniendo del otro lado a Juan Mónaco, con quien mantuvo algunos cortocircuitos tiempo atrás, en tiempos en que el ex campeón del US Open rechazó jugar la Copa Davis en tiempos de la capitanía de Martín Jaite.

Por la tarde, Orsanic y su principal colaborador, Mariano Hood, otro experto en dobles, trabajaron con Del Potro y Guido Pella, teniendo del otro lado a Sebastián Prieto y el sparring junior Genaro Olivieri. Una de las decisiones que deberá tomar el capitán argentino es la integración del dobles. Si opta por Del Potro-Pella, seguramente los singlistas del viernes serán Mónaco y el azuleño Federico Delbonis.

“No decidí quienes van a jugar el viernes, tengo una idea bastante definida, pero no confirmé nada. Necesito que estén todos bien y frescos para que puedan dar el máximo ante un rival que será muy duro y hará sentir su localía”, fue la primera reflexión del capitán Orsanic al hablar con los periodistas.

“Los jugadores se están adaptando a la cancha y a las pelotas. Es parte de nuestro trabajo hacerlo, también al clima. Nos estamos acondicionando, y cada día mejor. En estas primeras jornadas nos dedicamos a hacer trabajos de desplazamientos, con ese objetivo”, explicó Orsanic los trabajos de ayer. “A partir de mañana (por hoy) empezaremos a entrenar aspectos tácticos, de juego”, agregó.

Orsanic también habló acerca de la convivencia de Mónaco y Del Potro. “Es un orgullo estar en la cancha con jugadores como Del Potro y Mónaco. La convivencia es buena, me pone muy contento que así sea y acá lo más importante es el equipo, enfocado en el mismo objetivo, que es ganarle a Italia”, concluyó el capitán, sin dejar resquicio para la polémica.