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Que el fútbol describe la realidad mejor que muchos indicadores políticos o económicos, a nadie le caben dudas. La caótica organización de los torneos de AFA desafía los niveles de incertidumbre que rigen la vida cotidiana y por eso hoy se cometerá un nuevo atropello al fair play en la apertura de la penúltima fecha del torneo Clausura.
Como la sumisión del programa a los dictados de la TV no tiene en cuenta la limpieza de la competencia, la fecha de desdobla al punto de influir en la definición de los descensos, y Argentinos podría quedar condenado esta noche, aún sin jugar, a perder la categoría, si es que Unión, que se enfrenta a San Lorenzo, consigue la victoria en el Nuevo Gasómetro. De esa manera, el equipo santafesino le habrá sacado siete puntos de ventaja a Argentinos, al que le quedarán dos partidos por jugar, uno contra River, mañana. La lógica indica que ambos equipos debieran jugar sus partidos a la misma hora, pero el fútbol argentino se empeña en hacer las cosas de manera poco ecuánime.
San Lorenzo, que persigue una chance de jugar la próxima Copa Libertadores, no va a regalarle nada a Unión, casi condenado a jugar la Promoción, una zona en cuya resolución también tendrá que ver dos de los partidos que se jueguen hoy, Lanús-Racing y Vélez-Banfield. Colón-Huracán completa los adelantos.