DEPORTES
Lobo calibre 40
No es la primera vez que Carlos Cordone enfrenta problemas legales. El delantero fue protagonista de un sonado episodio de corte policial, en setiembre de 2002, en el que terminó demorado. Sucedió después de que el delantero presenciara un partido de su equipo favorito en el ascenso, Leandro N. Alem, de General Rodríguez. Cuando se marchaba de la cancha con un jugador de Alem, en su vehículo, fue provocado por individuos que viajaban en otro automóvil. Entonces, para disuadirlos, Cordone no tuvo mejor idea que mostrarles una pistola Glock calibre 40, considerada arma de guerra, que está registrada a su nombre y que lleva en la guantera de su auto. Ese gesto provocó su detención por algunas horas.