Desde Resistencia

La función de despedida de la Generación Dorada está cada vez más cerca, por lo que la idea del recambio que inexorablemente se viene está cada vez más inserta en la Selección Argentina. Por eso, este Sudamericano del Chaco tiene valor por el presente, pero también resulta una apuesta para el futuro. De ahí la importancia que le dan los referentes para que los más jóvenes vayan asimilando los valores que se fueron forjando en la última década.

“Sé que yo hablo más de lo normal en cualquier lado. Y más en este equipo. Soy bastante jetón, me gusta marcar cosas cuando las veo”, remarca Leo Gutiérrez (foto, el martes frente a Venezuela), el jugador con más partidos en la Selección Argentina e infaltable desde 1999 a las convocatorias con la camiseta albiceleste. “Los jugadores con más experiencia podemos ser referentes de este equipo y le estamos dando una mano al equipo”, agregó el capitán. Otro líder es Juan Gutiérrez, que hace unos años ocupó el rol de recambio y ahora ya forma parte del grupo estable. Y desde esa experiencia marca el camino. “Mi idea es transmitir los valores desde el ejemplo. No soy de hablar tanto, pero sí mostrarles la importancia de ser profesionales, cuidarse en las comidas, entrenarse con responsabilidad. Son todas cuestiones que yo aprendí de los más grandes y que intento trasladarles a los más chicos”, aseguró Juan Gutiérrez, el jugador más valioso de las últimas dos ediciones de la Liga Nacional.

Mientras los forjan con las premisas que sirvieron para la Generación Dorada, también destacan sus virtudes para poder sumarse al grupo. Y en especial miman a los más chicos, Franco Giorgetti y Marcos Delía. “Me sorprendieron todos los jóvenes, porque tienen mucho talento”, afirmó Leo Gutiérrez. “Delía va a ser un gran jugador de básquet. Además, le decís dos cositas para que las corrija y enseguida las agarra. Es muy inteligente. Tenemos muchos jugadores que van a hacer una carrera impresionante. Hay que darles tiempo y no pedirles maravillas desde el principio”, indicó el cordobés, compañero de Giorgetti en Peñarol.

Incluso, el entrenador Néstor García también valoró la evolución de las últimas dos perlas del básquet argentino. “Giorgetti y Delía son parte del futuro. Franco es la proyección del básquet nacional, tiene las condiciones ideales para el básquetbol actual”, elogió García. El recambio es inexorable y las expectativas están puestas en estos chicos.