La calma en los mercados mundiales duró muy poco. Luego de que la Reserva Federal (la banca central estadounidense) llevase su tasa de interés rectora a 2,25 puntos, las bolsas de Wall Street, Europa y Latinoamérica cerraron ayer en baja, mientras que las asiáticas lo hicieron con leve aumento. En este contexto, el segundo banco inversor de Estados Unidos, Morgan Stanley, anunció una caída de beneficios en el primer trimestre fiscal del año, mientras que el gobierno de George Bush anunció nuevas medidas para volcar capitales al mercado inmobiliario, golpeado desde que se inició la crisis de las hipotecas subprime. En la Bolsa porteña, el derrumbe de las empresas vinculadas con la industria petrolera terminó por hundir en 3,24 por ciento el índice MerVal.

Desde diciembre del año pasado, la FED inyectó en los mercados más de 400.000 millones de dólares para asegurar liquidez a los bancos. A pesar de las últimas medidas de la Reserva Federal, como bajar la tasa de interés rectora en tres cuartos de punto y prestar dinero a bancos de inversión de su “ventanilla de descuentos” –lo que permitió rescatar al banco de inversión Bear Stearns–, las bolsas mundiales registraron nuevas caídas. En Europa todas las bolsas sufrieron pérdidas, especialmente la de Londres, ya que se corrió el rumor –rápidamente desmentido– de que el banco HBOS enfrentaba dificultades de liquidez. En Estados Unidos, el Dow Jones cayó 2,36 por ciento y el Nasdaq, 2,57.

Una medida que no pasó desapercibida fue la flexibilización de las condiciones para el otorgamiento de créditos hipotecarios de dos gigantes supervisados por el Estado norteamericano, Fannie Mae y Freddie Mac. Las financieras podrán invertir más dinero en valores hipotecarios (200.000 millones de dólares), gracias a la reducción de 30 a 20 por ciento en la cuota mínima de capital propio que se les exige, con el objetivo de estimular la afluencia de nuevos capitales al golpeado mercado inmobiliario. Fannie Mae y Freddie Mac son investigados por posible manipulación de valores inmobiliarios, en un contexto donde las hipotecas subprime están en el centro de la crisis financiera mundial.

La incertidumbre que viene desde los Estados Unidos repercutió en el precio del petróleo, que bajó cuatro dólares (105,2 dólares). Esta baja incidió en la Bolsa de Buenos Aires, que cayó 3,24 por ciento. Los papeles que más perdieron fueron Petrobras Brasil (7,82 por ciento), Tenaris (6,93) y Petrobras Energía (6,38). Los bonos también registraron pérdidas, pero con movimientos más acotados. El Discount tuvo un repliegue del 0,79 por ciento y el Par perdió 0,51, mientras que el cupón PIB retrocedió 1,72 por ciento. El dólar cerró a 1,56 unidades por euro, moneda que se comercializó en 5,08 pesos ayer en Buenos Aires.