Una nueva Cumbre de Presidentes del Mercosur arranca hoy en Montevideo, donde la Argentina asumirá la presidencia pro témpore del bloque. Si bien hasta el momento no se esperan grandes definiciones por parte de los primeros mandatarios, los cancilleres de los cuatro países intentarán concluir la discusión sobre la proporcionalidad que le corresponde a cada país en el Parlamento del Mercosur, un primer paso para la elección directa de los legisladores de la región. Esta institución –que actualmente no es vinculante– fue creada en 2006 con el objetivo de dar respuestas políticas frente a los temas económicos, sociales y culturales que atraviesan el Mercosur, en paralelo con las decisiones de cada uno de los gobiernos. Para 2014, tanto Argentina, Brasil y Uruguay –Paraguay ya lo hizo– deberán decidir en una votación directa a sus representantes del Mercosur.

Este bloque de cuatro países tiene diferentes órganos de decisión, todos encabezados por los principales funcionarios de las cancillerías de cada país. El principal lugar en la toma de decisiones dentro de este bloque se da en el Consejo del Mercado Común (CMC) y en el Grupo Mercado Común (GMC). Según indicaron a este diario funcionarios del Palacio San Martín, aquí es donde priman las burocracias de las cancillerías que suelen pensar puertas hacia adentro y no tanto en “las posibilidades de la integración”. El Parlamento pretende convertirse en un eje de decisiones políticas (y vinculantes) dentro del bloque.

Actualmente cada país tiene 18 representantes en el Parlasur (voto paritario), que fueron designados por sus respectivos congresos. Sin embargo, en los próximos años se abrirá un proceso en el que los ciudadanos de cada país deberán elegir a sus parlamentarios, tal cual ocurre en Europa con los llamados eurodiputados. La principal discusión pasa por el nuevo sistema de representación (proporcionalidad atenuada), donde cada país tendrá la cantidad de representantes acorde con su peso en la región.

El acuerdo político que existe hasta el momento es que Brasil pasará a tener 75 parlamentarios (un 48,7 por ciento del total), por Argentina serán 43 (27,9 por ciento), y por Uruguay y Paraguay serán 18 legisladores (11,7 por ciento). En caso de que Venezuela ingrese al Mercosur debería contar con 25 parlamentarios. Los cancilleres deben aprobar esta proporcionalidad atenuada y luego los poderes ejecutivos deberán ajustar sus legislaciones nacionales para avanzar en la votación.

“Para 2014 debería haber elecciones directas en todos los países. Los partidos políticos deben moverse hacia la integración, por lo tanto hay que dejar de lado las visiones personales y tener una mirada regional. Estamos librando la batalla de la supranacionalidad”, afirmó a este diario el legislador del PT Florisvaldo Fier, conocido por su apodo de Doctor Rosinha.

En el proceso actual de maduración del Mercosur, la integración –política, económica y cultural– es todavía uno de los temas a resolver. En la actualidad existen dentro de este bloque muchos recelos por parte de los socios minoritarios, como Paraguay y Uruguay.

“Actualmente se habla mucho de la integración, pero nosotros vemos que cada vez hay más trabas comerciales dentro del bloque. Por eso nosotros queremos darle más fuerza a la delegación nacional y no tanto al Mercosur”, señaló un representante de la bancada paraguaya del Parlasur. Las decisiones que por ahora toma esta institución política del Mercosur no son vinculantes, por lo tanto no tienen un efecto directo sobre la ciudadanía. Sin embargo, los parlamentarios apuestan a que una vez que se produzcan las elecciones directas puedan modificarse las atribuciones del parlamento para tener un mayor peso en la sociedad y dentro del propio bloque. En la sede del Parlamento, ubicado en Montevideo, muchos son los que apuestan a que la cuestión de la representatividad se defina durante la presidencia pro témpore de Argentina.