El ministro de Agricultura, Julián Domínguez, expresó ayer que la actividad lechera arrojó durante 2010 un resultado “sumamente positivo”. “El mercado interno fue altamente demandante, con precios por momentos mejores a los externos, mientras que el mercado internacional presentó precios en alza, que se ubicaron entre 3300 y 3600 dólares la tonelada de leche en polvo”, afirmó el funcionario y además aclaró que la rentabilidad fue buena tanto para el sector primario como para la industria. De ese modo, les respondió implícitamente a algunas asociaciones de tamberos del interior que reclaman que el precio que reciben por litro suba de 1,35 a 1,70 peso. Ayer también hubo reclamos de los productores trigueros, que pretenden la liberalización de las exportaciones del cereal. El diputado macrista Jorge Solmi aseguró que “la situación de los productores es desesperante”, aunque sin mostrar ningún balance que lo acredite.