El sindicato de trabajadores bancarios, las cámaras empresarias del sector y el Ministerio de Trabajo se sentarán mañana a discutir el acuerdo salarial 2013. La idea hasta ahora era que las bancos otorguen un anticipo de tres cuotas de 1444 pesos y una suma no remunerativa de 770 pesos, a cuenta de la negociación. Para el gremio, eso implica sólo el adelanto de un acuerdo de tipo anual, pero el Gobierno considera que se trata de un convenio trimestral camuflado. Si bien ese esquema fue avalado años atrás, la coyuntura delicada con relación a los precios y la mayor división del movimiento obrero organizado determinan que el Gobierno pretenda que se alcance un acuerdo de mayor plazo para evitar que esa modalidad se replique en otros sectores y alimente las expectativas inflacionarias. El gremio pide enfocar el control sobre los precios y no sobre el salario e insiste en que no se moverá del anticipo pactado el último jueves.

El acuerdo que se discute implica un incremento, para los salarios más bajos, del 20 por ciento más el monto no remunerativo, lo que en total suma un alza de 23,5 por ciento. La semana pasada se instaló en los medios que el acuerdo era de carácter trimestral. Ante ello, el ministerio salió a aclarar que sólo homologa acuerdos, como mínimo, anuales. Durante la jornada de ayer, las partes se juntaron a pedido del gobierno para “aclarar el contenido del acuerdo”, en una reunión corta presenciada por las segundas líneas de la dirigencia gremial y patronal. Se realizó en la sede de la cartera laboral y fue encabezada por la viceministra, Noemí Rial.

Antes del encuentro, La Bancaria solicitó aplazar 48 horas la convocatoria. “Los representantes del gremio –asistió el secretario gremial, Gustavo Díaz– fueron sólo al efecto de ratificar que la reunión pasara para el día 23, pedido al que el ministerio accedió”, explicó a este diario Eduardo Berrozpe, de La Bancaria. El sindicato justificó el pedido de postergación por las dificultades de convocar a los representantes de las regionales de todo el país. Aprovechará que mañana es la reunión del Consejo Directivo Nacional, para que luego la cúpula asista a la sede de la avenida Alem del ministerio.

El acuerdo salarial en cuestión prevé un anticipo a cuenta de la paritaria. La Bancaria y las cámaras empresarias del sector (ABA, Adeba, Abappra y ABE) negociaron que los empleados de los bancos públicos y privados perciban 1444 pesos remunerativos por enero, febrero y marzo, más una compensación no remunerativa por única vez de 770 pesos. Así, en marzo se definirían los términos de un acuerdo con vigencia del 1º de enero al 31 de diciembre de 2013. Se trata de una modalidad utilizada años atrás. Al Gobierno le permitía no empañar el período de fiestas y vacaciones por la discusión salarial, al tiempo que evitaba que el aumento acordado generase un piso relativamente alto para los otros gremios, por la rentabilidad de las empresas y la fortaleza gremial. Los bancarios, en tanto, se cubrían hasta marzo y allí podían pedir salarios con un mejor panorama de los precios y en relación con otros sectores. Para 2012, por ejemplo, se acordaron tres cuotas de 1180 pesos más 600 no remunerativos.

Si bien desde el gremio indican que no se trata de un acuerdo trimestral sino de un anticipo, otros dirigentes sindicales opositores al gobierno resaltaron que el convenio supone rediscutir salarios dentro de tres meses. En este contexto, el gobierno buscaría acomodar los tantos a un esquema directamente anual, en un mensaje implícito a todo el arco sindical. La Bancaria es un gremio enrolado en la CGT de Hugo Moyano. “No hay que estar atento a los salarios sino a los precios”, pidió Berrozpe.

El salario básico de un bancario es de 7220 pesos, y el porcentaje anticipado funcionó hasta ahora como piso de la paritaria. Desde el gremio argumentan que los bancos en 2012 mostraron una tasa de ganancia del 41 por ciento, superior al promedio de la economía nacional. Además, para matizar el porcentaje de suba, recuerdan que el sector tiene una escala salarial muy heterogénea, con salarios que llegan a quintuplicar el básico. Son en total 100 mil trabajadores bancarios.