Inspectores de la Agencia de Recaudación bonaerense (ARBA) labraron ayer actas de clausura de locales gastronómicos de la Costa Atlántica que no emitían factura y registraban otros incumplimientos fiscales. Las faltas fueron comprobadas por el propio titular de ARBA, Iván Budassi, quien realizó consumos en esos comercios y luego dispuso un operativo formal de fiscalización. Los establecimientos en infracción fueron dos sucursales de una cadena de sushi de Pinamar y el bar de un complejo de cabañas en Río Quequén, Necochea. “Además de que los responsables no entregaban boletas y subdeclaraban ventas, los inspectores descubrieron otras maniobras, como la falta de documentación que respalde parte de la mercadería que había en los negocios, la no presentación de declaraciones juradas, montos impagos de anticipos de Ingresos Brutos y hasta ampliaciones catastrales sin declarar”, denunció ARBA en un comunicado.