El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, aseguró ayer que el resultado fiscal primario y financiero del mes de enero arrojó un saldo positivo, tras dos años de computar resultados deficitarios. “Durante los últimos once años, nueve han sido de superávit fiscal, con un resultado ligeramente negativo en los últimos dos años”, precisó el funcionario, para remarcar que en 2013 el rojo sumó 22.479 millones de pesos, lo cual fue equivalente al 0,8 por ciento del Producto.

El jefe de los ministros indicó que el déficit fiscal fue producto de una estrategia del Gobierno para dinamizar la demanda agregada a través de estímulos al consumo y la inversión del sector público. Capitanich adelantó que esta semana el secretario de Hacienda, Juan Carlos Pezoa, dará a conocer los resultados finales de las cuentas fiscales de enero, lo cual permitirá conocer la magnitud del superávit (resultado positivo entre ingresos y gastos del Gobierno).

A su vez, el funcionario indicó que “las usinas opositoras (consultoras del establishment) pretenden menoscabar el comportamiento de la situación fiscal, con el manual del Fondo Monetario Internacional que tanto utilizan los economistas ortodoxos en la Argentina”. El ministro de Economía, Axel Kicillof, defendió el uso del gasto público para sectores sociales e inversión.