ECONOMíA › LAS EXPORTADORAS DE CEREALES VERSUS LA AFIP
Batalla impositiva de peso pesado
Cerealeras y aceiteras salieron a contestar el embate de la AFIP contra la subfacturación de exportaciones vía triangulación. La pelea se produce en medio de la disputa por la sanción en la Cámara alta de las modificaciones a la Ley Penal Tributaria. El eje de la disputa es el de la valuación a tomar como base para el impuesto a las ganancias.
El proyecto de reforma establece que sólo cuando las operaciones se realicen a través de “firmas vinculadas fantasma” se tomará como base “el precio de los mercados internacionales transparentes” el día del embarque y no el que figure en la factura. Las empresas sostienen que el cambio de método de valuación “destruirá los mercados de futuros” y se convertirá en “una nueva retención” a las exportaciones. El presidente de la Cámara de la Industria Aceitera, Raúl Padilla, consideró que las ventas entre firmas de un mismo grupo son algo “absolutamente común en la actividad” y calculó que “internacionalmente, entre el 60 y el 70 por ciento opera bajo esa estructura”. Sin embargo, el texto de la reforma no se refiere a cualquier operación entre vinculadas, sino a aquellas en las que intervienen firmas creadas ad hoc para evadir. Por ello, fuentes de la AFIP se mostraron “sorprendidas” por la reacción de los exportadores.
La discusión también se dio en los números. Las cámaras del sector respondieron a una solicitada publicada por la Presidencia el fin de semana en la que según la AFIP, entre 1997 y 2001 sobre ventas por 22.407 millones de dólares, sólo pagaron impuestos por 19 millones. Las empresas dijeron que vendieron por 32.550 millones de pesos y pagaron 411 millones de pesos. Ninguno de los dos mentía, simplemente hablaban de universos distintos. La AFIP sobre las 7 principales firmas del sector, las empresas sobre el total del sector.