La Agencia de Recaudación de la provincia de Buenos Aires (ARBA) implementará a partir del 1º de enero un sistema de cámaras fijas y móviles para combatir la evasión impositiva. Así lo confirmó el director ejecutivo del organismo, Iván Budassi. La iniciativa tuvo una experiencia piloto en restaurantes con menú fijo, donde se encontraron casos de subfacturación importantes. En uno habían declarado 2300 comensales por mes, cuando las cámaras apostadas frente al negocio determinaron que comieron en el lugar unas 9000 personas. En otro, la relación entre lo declarado y lo constatado fue de 1050 a 6700 personas. La rectificación de estos casos implicó recaudar hasta dos millones de pesos. Los radares móviles se ubicarán en rutas, autopistas y calles y se focalizarán en la evasión sobre propiedad del automotor, a partir del cruce con el historial de patentes impagas. “Esta tecnología nos permite ser más eficientes y optimizar recursos para fiscalizar con precisión aquellos sectores donde detectamos altos niveles de evasión”, aseguró Budassi. Desde ARBA explicaron que no se darán a conocer los videos como protección a la intimidad de los clientes que frecuenten los restaurantes.