El ministro de Relaciones Exteriores, Héctor Timerman, se reunió ayer con el presidente de la Asamblea General de las Naciones Unidas, Sam Kutesa. Los diplomáticos analizaron el progreso preparatorio del debate sobre el marco jurídico multilateral para los procesos de reestructuración de deuda soberana que tendrá lugar desde enero de 2015 en la ONU. Impulsado por Argentina y el G-77 más China, el organismo multilateral aprobó en septiembre una iniciativa para desarrollar un mecanismo legal global que conduzca en forma previsible y sostenible los procesos de reestructuración de deuda luego de los default soberanos. El proyecto que podría aprobarse a mediados del año próximo recibió el apoyo de 124 países y sólo once votos en contra. Entre quienes se opusieron figuran los principales centros financieros, como Estados Unidos, Inglaterra, Japón y Alemania. A pesar del rechazo, esos países enfatizaron recientemente en la cumbre de presidentes del G-20 la necesidad de limitar el accionar carroñero del sistema financiero internacional. En Nueva York, Timerman también mantuvo un almuerzo de trabajo con los representantes de la Celac, donde se abordaron temas referidos al proceso de integración regional.