La petrolera Shell comunicó que su actual presidente, Juan José Aranguren, se retirará de la compañía el 30 de junio y su cargo será ocupado por Teófilo Lacroze, un ejecutivo con casi veinte años de carrera. Aranguren estuvo doce años al frente de la firma y su mandato se caracterizó por protagonizar fuertes cruces con el Gobierno, que incluyeron al propio Néstor Kirchner, al ex secretario de Comercio Interior Guillermo Moreno y, más recientemente, al ministro de Economía, Axel Kicillof.

En marzo de 2005, Shell había aplicado una suba del 4,2 por ciento en sus precios. La respuesta oficial no tardó en llegar. Kirchner pidió “no comprar más a Shell ni una lata de aceite y que se den cuenta de que los argentinos ya no soportamos más este tipo de acciones”. En una entrevista en 2013, Aranguren aseguró que a pesar de que en ese momento sus ventas cayeron, la empresa aumentó su ganancia por la exportación.

La mayor parte de los enfrentamientos entre Shell y el Gobierno tuvieron como protagonistas a Aranguren y a Moreno, quien llegó incluso a aplicar la Ley de Abastecimiento contra la petrolera para que retrotrajera aumentos de precios. En ese contexto, febrero de 2011, el ministro Julio De Vido le dedicó a Aranguren que “más que un gerente de una compañía extranjera parece un referente de la oposición”. El último episodio ocurrió a comienzos de 2014, cuando Kicillof acusó a Shell de inflar la cotización del dólar para forzar la devaluación.