El crédito al sector privado anotó una caída del 5,5 por ciento en abril respecto del mismo mes del año pasado. La cifra tiene en cuenta el financiamiento real, es decir la cantidad de préstamos otorgados una vez descontado el efecto de los precios. El alza de la tasa de interés del crédito para consumo y producción fue central para explicar el retroceso del financiamiento en los primeros meses del año, con una economía en la que se observan fuertes tensiones de demanda. Ayer el Banco Central redujo su tasa de referencia, pero quedó en un nivel todavía elevado de 31,5 por ciento (ver página 5).

A diferencia de la pérdida de capacidad de compra de la población y el retroceso de empresas dedicadas a actividades productivas, el sector financiero continúo embolsando importantes rentabilidades. Los bancos obtuvieron utilidades por 15.916 millones de pesos en abril, con un alza del 25 por ciento respecto del mismo mes del año pasado. El margen financiero, en el que se computan las ganancias por el negocio de la tasa de interés, la compra de Lebacs, la adquisición de títulos públicos en dólares y las operaciones con moneda extranjera, acumuló 72.190 millones de pesos en los primeros cuatro meses del año, con una suba del 37 por ciento interanual. Estas utilidades quedaron registradas en el informe sobre Bancos de la autoridad monetaria, un documento en el que se detalla mes a mes la evolución del patrimonio del sistema financiero.

En lo que refiere al dólar, ayer se ubicó en 14,18 pesos, con un alza de 5 centavos. Las liquidaciones del complejo agropecuario volvieron a anotar la cuarta semana de caída, al venderse 434 millones de dólares entre el 13 y el 16 de junio, según lo informó Ciara, cámara que agrupa a los agroexportadores. La semana previa se habían registrado ventas por 526 millones de dólares. Los despachos de soja empiezan a moderarse, tras las fuertes ventas por la estacionalidad del segundo trimestre.