ECONOMíA › CREAN UNA SOCIEDAD ANONIMA ESTATAL PARA ADMINISTRAR EL CORREO
Buzones sin intervención y sin plazo
La figura de la intervención fue reemplazada por otra forma jurídica, una SA de capital estatal. No hay plazo para privatizar.
El Poder Ejecutivo puso fin a la intervención del Correo. Lo hizo constituyendo la empresa Correo Oficial de la República Argentina Sociedad Anónima, Corasa, cuyas acciones estarán ciento por ciento en manos del Estado. La medida persiguió dos objetivos. Desembarazarse del plazo perentorio de 180 días para la reprivatización, asumido en noviembre pasado cuando se revocó la concesión al Grupo Macri, y comenzar a utilizar una forma jurídica más ágil para la gestión empresaria. El ministro de Planificación, Julio De Vido, afirmó que por ahora no hay nuevos plazos para volver a privatizar. “Observamos que el negocio tiende a consolidarse y los números podrían mostrar una rentabilidad interesante”, sostuvo.
El regreso al Estado del que hoy vuelve a asumirse como correo oficial se había producido luego de la acumulación de una fuerte deuda del concesionario por incumplimientos en los pagos del canon anual. Desde que el servicio postal oficial se transfirió a manos privadas, un caso sin precedentes en las economías desarrolladas, la firma fue sometida a un fuerte proceso de ajuste de personal. Adicionalmente, su persistente déficit operativo, compensado de alguna manera con el no pago del canon, también redundó en el aumento de pasivos con terceros. El grupo controlante intentó en reiteradas oportunidades la búsqueda de un socio estratégico, aunque sin éxito.
Cuando la concesión fue definitivamente revocada en medio de un proceso de convocatoria de acreedores, el Gobierno anunció que reconcesionaría el servicio en un plazo de 180 días. Pasados los seis meses, la interpretación oficial sobre el plazo inicialmente fijado fue que se trataba de 180 días hábiles, no corridos. Con la nueva forma jurídica, una sociedad anónima cuyo capital accionario será controlado en un 99 por ciento por el Ministerio de Planificación y el 1 por ciento por el Ministerio de Economía, el problema de los plazos se terminó. Cabe destacar que, a pesar de su participación simbólica, Economía no tendrá ninguna injerencia en el manejo de la firma.
En la conferencia de prensa brindada ayer, De Vido, acompañado por el presidente del correo, Eduardo Di Cola, el secretario de Comunicaciones, Guillermo Moreno, y el interventor de la Comisión Nacional de Comunicaciones, Fulvio Madaro, informó que el presidente Néstor Kirchner había firmado el Decreto de Necesidad y Urgencia 721, cuyo contenido fue el cambio de la figura jurídica del Correo. El ministro aclaró que la “vocación no es el estatismo, pero vamos a ir viendo cómo evoluciona la gestión oficial en el Correo” porque “observamos que el negocio tiende a consolidarse y los números podrían mostrar una rentabilidad interesante”. En otras palabras, los plazos para la privatización ya no existen.
El decreto establece que Corasa prestará el servicio oficial de correo, comprendiendo todos los servicios postales, monetarios y de telegrafía prestados oportunamente por Encotesa, y los restantes servicios de la ex concesionaria Correo Argentino S.A., como el Servicio Postal Básico Universal.
El segundo objetivo de la nueva forma jurídica tiene carácter estrictamente operativo y responde a una sugerencia realizada por la Sigen, que había considerado que “la capacidad de la unidad administrativa” implicaba “un retroceso del status jurídico” que la firma tenía en tiempos de Encotesa, antes de su privatización. Ello se debe a que al ser una “unidad estatal” quedaba sometida a restricciones en cuanto a la gestión netamente empresaria. No sólo por los problemas propios de toda burocracia en la toma de decisiones, sino también por los vinculados con las compras y contrataciones, que exigían licitaciones y concursos para todas las operaciones.
De Vido completó el anuncio insistiendo que la reprivatización se prorrogó “sin fecha fija” y consignó que “el presidente Kirchner resolverá qué hacer en el futuro conforme evolucione la gestión del servicio”. Para el ministro, la empresa, que controla el 40 por ciento del mercado postallocal, obtiene superávit y es rentable. “La facturación proyectada para este año ronda los 500 millones de pesos”, completó.