Los préstamos al sector privado se incrementaron en marzo 2,4 por ciento y acumulan una suba de 39,6 por ciento en términos nominales durante los últimos doce meses, según informó ayer el Banco Central. La suba del mes estuvo liderada por los préstamos con garantía real (aquellos que se dan contra prenda de algún bien o inmueble) y por las financiaciones al consumo, mientras que los préstamos comerciales registraron una leve suba, luego de dos meses previos de estancamiento. Pese a la recuperación, el monto total prestado (78.150 millones) representa apenas el 10,5 por ciento del PBI, una cifra relativamente pequeña en relación con otros países como Chile (55%), Brasil (más de 30%) o naciones desarrolladas donde alcanza cifras superiores al 80 por ciento del producto.

El crecimiento de las financiaciones con garantía real en pesos acumuló un 29 por ciento en términos interanuales, superando por primera vez al de las financiaciones comerciales (26%). El principal impulso vino por el lado de los préstamos prendarios que registraron un incremento de 120 millones en el mes (3,2%), acumulando un aumento interanual de 55,7 por ciento. Este aumento ya se podía intuir la semana pasada cuando se conoció que la producción automotriz registró en marzo el mayor nivel de los últimos 15 años, llegando a 44.886 unidades, 26,7 por ciento más que hace un año. Esa producción está impulsada por mayores exportaciones, pero también por un mercado interno que consume aprovechando el incremento del poder adquisitivo y las oportunidades de financiación.

Por su parte, los préstamos hipotecarios registraron en marzo un aumento de 290 millones (2,8%), acumulando un incremento interanual de 21,1 por ciento. El informe del Central vinculó esta mejora con las modificaciones introducidas a comienzos de mes en las pautas de originación y administración de los préstamos, con el fin de facilitar el acceso a estas líneas de crédito. “Dichas medidas tienden a mejorar la capacidad de obtener fondos de largo plazo, al permitir la securitización de préstamos generados bajo criterios homogéneos, a la vez que incorporan mejoras entre las que se destaca la incorporación de métodos alternativos para el análisis del otorgamiento del crédito, tales como las recientemente aprobadas técnicas de scoring y screening”, destacó la entidad.

Las financiaciones comerciales volvieron a crecer, en esta oportunidad alrededor de 350 millones (1,2%), tanto por el comportamiento de los adelantos, que se incrementaron 120 millones (1,1%), como por los documentos, que crecieron 190 millones (1,4%). Por último, las financiaciones al consumo aumentaron 780 millones (3,6%), suba que, si bien sigue siendo elevado, resultó el menor desde agosto de 2006. En este caso, la mejora se debió al crecimiento de 690 millones de pesos en préstamos personales (4,9%) y de 90 millones en financiaciones con tarjetas de crédito (1,1%). Esta línea es la que mejor recuperación viene mostrando, pero en los últimos meses redujo su ritmo de crecimiento interanual. El crecimiento interanual de marzo es de 60 por ciento, lo que implica una caída de 15 puntos respecto del máximo alcanzado a mediados de 2005.