La Secretaría de Agricultura brindó ayer detalles sobre la implementación del Plan Ganadero ante la atenta mirada de los productores reunidos en el Auditorio 2 de la Rural. El foco estuvo puesto en el componente “Más terneros”, a través del cual se buscará aumentar los índices de productividad. El Gobierno asignó 52 millones de pesos al plan para lo que queda del año y el 70 por ciento será destinado a ese ítem. Sin embargo, los expedientes que autorizan los primeros desembolsos todavía están en trámite. La expectativa de los productores también estuvo centrada en el discurso que hoy brindará el secretario Javier de Urquiza, pues ayer circuló la versión de que se podría anunciar una compensación para la actividad de invernada. Sin embargo, fuentes oficiales aseguraron ayer a Página/12 que todos los anuncios son discutidos antes en la mesa de diálogo con el sector y allí no se analizó esa posibilidad.

El Plan Ganadero se vino prometiendo desde el inicio del gobierno de Néstor Kirchner, pero el enfrentamiento con los productores demoró su definición. Recién el pasado 19 de junio se publicó el marco legal en el Boletín Oficial y ahora están en trámite tres expedientes de resolución de pago que permitirán comenzar a desembolsar los 52 millones de pesos presupuestados para lo que queda del año. El 70 por ciento de los fondos que se asignen será destinado al componente Más Terneros, que prevé brindar una serie de beneficios a los productores que implementen decisiones de alto impacto productivo: incorporación de asesoramiento técnico profesional, fortalecimiento de trabajo grupal, mejoras en la sanidad y reproducción del rodeo y mejoramiento de la oferta forrajera.

La directora nacional de Ganadería, Fabiana Colombo, explicó ayer que se otorgará un aporte económico no reintegrable de 10 mil pesos a los productores que tengan entre 51 y 100 vacas y superada esa cantidad corresponderán 25 pesos por cabeza hasta un máximo de 500 animales. Por lo tanto, los ganaderos que se inscriban podrán recibir hasta 20 mil pesos, con una metodología similar a la que aplica la Oncca para otorgar las compensaciones a los productores de otros sectores.

El objetivo es mejorar el índice de procreación. Este indicador evidencia cuántos terneros surgen por cada cien vacas. En el país, el promedio es de 62 terneros, porque no todas las vacas quedan preñadas y muchas crías mueren entre el servicio y el destete, ya sea por abortos u otros problemas. En la pampa húmeda nacen 70 terneros cada 100 vacas y en el NEA apenas 50. Daniel Rearte, ingeniero del INTA, señaló ayer que la intención oficial es elevar el promedio nacional hasta un 85 por ciento.

El plan contempla además que otro 25 por ciento de los recursos sea destinado al componente apoyo a los planes ganaderos provinciales, pero la asignación de esos recursos estará frenada hasta que se adecuen los programas provinciales al plan nacional reglamentado en junio. El 5 por ciento restante se asignará a mejorar la comercialización del ganado y otros gastos operativos y de difusión. Entre los cambios previstos para la comercialización figura la implementación del cuarteo de medias reses que permitirá adecuar la distribución de los cortes de acuerdo con la demanda de los diferentes estratos sociales.