Viernes, 16 de noviembre de 2007 | Hoy
El cierre de la conferencia anual de la Unión estuvo a cargo del ministro de Economía, que no seguirá en ese cargo con Cristina. Peirano fue ovacionado de pie por los industriales, que apuestan a que él lidere el proyecto de banco de desarrollo que prometió el Gobierno.
Por Fernando Krakowiak
En su primera aparición pública luego de que se confirmara su próxima salida del Ministerio de Economía, Miguel Peirano elogió la gestión del presidente Néstor Kirchner y evitó referirse a las causas que motivaron su desplazamiento. El funcionario cerró ayer la conferencia anual de la Unión Industrial Argentina frente a un auditorio colmado de empresarios que lo aplaudieron de pie. Su ingreso se produjo por una puerta de servicio para evitar las preguntas de los periodistas y apenas concluyó el discurso partió rápidamente por el mismo lugar. Los industriales esperan que sea designado para encabezar el banco de desarrollo que promete crear el Gobierno, pero fuentes de Economía aseguraron que todavía “no ha recibido ningún ofrecimiento”.
En su discurso, Peirano se mostró leal al Gobierno y reafirmó su vínculo con la industria, destacando la recuperación que han tenido los distintos sectores a partir de la acción oficial y elogiando su potencialidad de crecimiento. De ese modo, buscó seguir posicionado como un referente del sector productivo y una opción para un puesto en la futura administración de Cristina Fernández. “La convicción de la nueva presidenta en consolidar el crecimiento y priorizar el desarrollo industrial generan un marco ideal para que los industriales inviertan y logren, con el conjunto de todos los sectores, el desarrollo de la Argentina”, sostuvo.
Los industriales aplaudieron de pie en la sala de conferencias del Sheraton de Pilar, intentando una reivindicación un poco más efusiva que la que habían expresado a comienzos de semana, cuando se limitaron a decir que “lo más importante es el modelo”. Sobre el tibio comunicado que emitió la UIA el domingo, luego de que comenzaran a cobrar fuerza los rumores sobre la posible salida del ministro, hay versiones encontradas. Algunas fuentes aseguraron que la carta motivó discusiones entre los dirigentes que querían respaldar abiertamente a Peirano y aquellos que prefirieron “sacrificarlo” para no poner en riesgo la buena relación que tienen con el Gobierno. Otros señalaron, en cambio, que la posición de la central fabril fue acordada con el propio funcionario. El fuerte abrazo que se dieron Peirano y el presidente de la UIA, Juan Carlos Lascurain, al final del evento fortalece esta segunda versión.
Los empresarios no quieren que nada irrite a Kirchner. Por eso luego de la presentación se encargaron de resaltar que la ovación a un ministro desplazado por enfrentarse al secretario Guillermo Moreno no debía ser interpretada como una provocación al Presidente. “Poné que Peirano elogió a Kirchner varias veces, porque si sólo destacás la ovación capaz que le hacen la cruz”, señaló una fuente de la entidad ante este diario. Efectivamente, Peirano mencionó a Kirchner en varias ocasiones e incluso aseguró que “el buen momento de la industria se debe al liderazgo del Presidente, que ha permitido revalorizar una lógica de desarrollo de autonomía nacional en las decisiones”.
El nombramiento de Martín Lousteau como futuro ministro de Economía fue recibido positivamente por los empresarios, pero igual ayer seguían lamentando la salida de Peirano. “Lo importante es la continuidad del modelo, pero Miguel también era muy importante porque era de la casa y la entidad tenía un puente de plata hacia el Gobierno”, señaló a Página/12 el ex presidente de la UIA Héctor Méndez. “Se va un amigo, pero se va de una manera muy digna”, sostuvo a este diario Cristiano Rattazi, presidente de Fiat.
Ahora los industriales esperan que Peirano se haga cargo del futuro banco de desarrollo que promete impulsar el Gobierno para ayudar a incrementar las inversiones otorgando créditos de largo plazo a tasas accesibles. Ese fue uno de los temas que ayer se debatieron en la conferencia. Esteban Domina, actual titular del BICE, pareció darles crédito a las versiones sobre la creación de una entidad de ese tipo al afirmar que “llegó la hora de que se movilicen los ahorros de los argentinos a favor del desarrollo productivo”. No obstante, les advirtió a los industriales que “el tomador debe dejar de soñar con que el fomento es no pagar el crédito”.
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